Confusión. El atentado fue reivindicado por el Estado Islámico, pero el gobierno no lo consideró un acto terrorista.
El ataque perpetrado el miércoles por al menos un hombre armado en un hotel de Manila causó pánico y creó confusión al ser reivindicado por el Estado Islámico (EI) pero no ser considerado por las autoridades filipinas como un acto terrorista.
El ataque se produjo a media noche en el Resort World Manila, que alberga un cine, un casino y una galería comercial, y es un complejo hotelero y de entretenimiento cercano al aeropuerto Ninoy Aquino, al suroeste de la capital filipina.
La incursión causó el pánico entre las personas que se encontraban en el establecimiento, donde empleados y clientes trataron de huir de manera precipitada tras producidas las primeras detonaciones, seguidas de un incendio.
Testigos relataron que algunas personas saltaron por la ventanas al escucharse los primeros disparos. Un conserje del hotel dijo a la web local Rappler que el ataque tuvo como escenario un restaurante de la segunda planta.
El conserje, identificado como Roberto Palao Junior, explicó que ayudó personalmente a algunos turistas que resultaron heridos.
Medios locales cifraron en 25 los heridos, no se confirmaron muertos.
El jefe de la Policía filipina, Ronald Dela Rosa, declaró, no obstante, a una radio local que no cree que el ataque fuera de carácter terrorista.
Tras afirmar que el atacante había sido neutralizado, aseguró que "sólo se produjeron heridos cuando la gente trató de huir, no por arma de fuego".
El responsable policial dijo que "lo más probable es que el móvil fuera el robo".