Sin terminar. La directora del festival, Daniela Michel dice que este año varios filmes quedarán fuera del certamen.
Un espacio para las películas de comedia, así como ausencia de filmes porque no llegarían a tiempo, marcará la 15 edición del Festival Internacional de Cine de Morelia, a realizarse en octubre próximo. El FICM dio a conocer su selección oficial, destacando siete filmes de ficción, la mitad de lo registrado en 2016.
Daniela Michel, directora del certamen, explica: "Siempre tratamos de que haya espacios para ellas, pero este año hubo trabajos no terminados que nos hubiera encantado tenerlos; no podemos arriesgarnos y, si alguna es terminada, ya lo anunciaremos", indica vía telefónica.
"Hubo crisis económica, tenemos otro mundo, la devaluación del peso y creo eso afectó a que no fueran terminadas varias para las fechas del festival", considera Michel. En la Selección Oficial se encuentran Los adioses, acerca de la vida de Rosario Castellanos y "Oso polar", primer filme nacional hecho con un Iphone.
También están Ayer maravilla fui, de Gabriel Mariño, Sinvivir, de Anais Pareto, Casa caracol, de Jean Marc Rousseau, Cuadros en la oscuridad de Paula Markovitch y The Drawer Boy de Arturo Pérez.
En el género documental se encuentran El vendedor de orquídeas, del ganador en Venecia, Lorenzo Vigas, Rush hour de Luciana Kaplan y Guerrero, de Ludovic Bonleux.
Informa que el documentalista Eugenio Polgovsky (Trópico de cáncer), fallecido hace una semana en Inglaterra, será objeto de un homenaje en el marco del festival.
Este año, indica Michel, varias funciones mexicanas de gala, no competitivas, serán comedias.
"Tienen buena calidad, no son tan de festival y competencia, pero traen nivel", dice. Sin decir títulos, pues aún se afinan detalles, Michel recuerda el caso reciente de Hazlo como hombre, que registra más de 3 millones de asistentes. "Hay cineastas que están haciendo bien las cosas y es importante tenerlos", estima.
Además manifestó su satisfacción por el creciente número de trabajos registrados, "que es un reflejo del buen estado de salud que vive el cine en México".
"Recibimos 909 trabajos, superando el número de registro año con año y eso nos da mucho gusto, porque intentamos siempre hacer un festival de calidad mundial", expuso Michel, para quien resulta también un honor que los cineastas sigan viendo el FICM como una gran opción para exhibir sus trabajos.
Contrario a otros encuentros fílmicos, en los que se hace más parafernalia a las alfombras rojas, el FICM, dijo, busca que una vez que los trabajos estén seleccionados, el jurado que los califique esté preparado y sea de primer nivel.
