La ofensiva de los Cardenales de San Luis anotó nueve carreras en el octavo inning para vencer ayer 11-4 a los Cachorros de Chicago.
Durante 11 bateadores seguidos en el octavo inning, los Cardenales de San Luis fueron imparables.
Y fue una reacción enfática a una derrota desmoralizadora.
Paul DeJong rompió el empate con un doblete de dos carreras en una octava entrada en que San Luis anotó nueve veces y los Cardenales enfriaron ayer a los Cachorros con una victoria de 11-4 en Chicago.
"Nunca había sido parte de algo así, anotar nueve carreras sin outs", dijo DeJong. "Pero creo que hemos enviado un mensaje".
Chicago llegó al octavo inning con ventaja de 3-2 y en busca de su séptimo triunfo seguido. Pero San Luis envió a 14 bateadores al plato en su entrada de mayor cantidad de carreras en la temporada, sacando provecho de seis pasaportes negociados a tres relevistas para mejorar su marca a 4-4 luego de la pausa del Juego de Estrellas.
Carl Edwards Jr. (3-2) fue reemplazado después que los primeros tres bateadores que encaró se embasaron. Héctor Rondón luego dio pasaporte a Jedd Gyorko, lo que empató la pizarra a 3-3, y DeJong le siguió con un doblete. Los Cardenales se desataron a partir de ahí.
Cuando DeJong, el 14to bateador del inning, se ponchó tirándole con corredores en segunda y tercera para el último out, los fanáticos de Chicago aplaudieron sarcásticamente.
El abridor dominicano Carlos Martínez se fue sin decisión por San Luis tras recibir 10 imparables y tres carreras en una labor de seis entradas. Ponchó a tres y cedió una base por bolas.
Matt Bowman (2-3) sacó el último out del séptimo episodio para apuntarse la victoria.
Chicago no contó con el tercera base Kris Bryant, que sufrió un esguince de meñique izquierdo al barrerse de frente el miércoles. Los análisis de rayos X no revelaron fractura, pero Bryant sigue sintiendo dolor y eso le impide batear con fuerza.
El abridor de Cachorros Jake Arrieta admitió dos carreras en seis buenos innings.