El mandatario estadunidense anunció el miércoles la nominación de la embajadora en tierras canadienses, que debe ser ratificada por el Congreso de Estados Unidos. (ARCHIVO)
La republicana designada por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, como embajadora de ese país ante Canadá, Kelly Knight Craft, podría jugar un papel importante, pero no determinante, para mejorar la relación bilateral, confiaron analistas.
Canadá no fue el primer país en visitar por el nuevo presidente estadunidense, como solía ser una tradición, pese a que el primer ministro Justin Trudeau invitó a Trump a visitar Ottawa.
Por cinco meses la embajada de Estados Unidos en Ottawa ha estado acéfala, luego que el embajador Bruce Heyman renunció el 20 de enero pasado, tal como lo pidió Trump antes de su toma de posesión como Presidente.
El mandatario estadunidense anunció el miércoles la nominación de la embajadora en tierras canadienses, que debe ser ratificada por el Congreso de Estados Unidos.
Kelly Craft y su esposo Joe son una pareja de millonarios que han recaudado y donado fuertes sumas de dinero para campañas republicanas. En 2016, dio a la campaña de Trump 265 mil 400 dólares y al Comité Nacional Republicano lo apoyó con 17 mil dólares, según la televisora canadiense Global News.
Además, Craft –proveniente de un pequeño poblado de Kentucky-, dio docenas de contribuciones en 2016 para el Partido Republicano y candidatos en todo el país.
La filántropa, quien también recaudó fondos para la Universidad Moorhead en Kentucky, es aficionada al basketball. En marzo pasado fue a Dallas a ver jugar a los Raptors saludar a su entrenador Dane Casey, su ex compañero en la Universidad de Kentucky en la década de 1970.
“La embajadora será una liga importante entre ambos países, los cuales, junto a México, comenzarán en agosto la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN)”, indicó Bill Curry, del diario The Globe and Mail.
Agregó que Craft tiene una “larga y permanente relación con el vicepresidente estadunidense Mike Pence y con decanos congresistas republicanos, quienes jugarán un rol clave en cualquier cambio de política que afecte el comercio entre ambos países”.
Nacida en la pequeña comunidad de Glasgow, en Kentucky, la embajadora designada, madre de dos hijos de su primer matrimonio, tenía una empresa de consultoría y mercadeo.
En 2007, el entonces presidente George W. Bush la nombró delegada alterna ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, donde habló sobre el apoyo de Estados Unidos a Africa.
La millonaria y filántropa ha dicho que le interesan temas de la infancia y asuntos sociales, humanitarios y culturales. Tras el tsunami de 2004 en Sri Lanka, fundó una organización caritativa para ayudar a los niños huérfanos.
Zalmay Khalilzad, quien fue embajador estadunidense ante Naciones Unidas en ese entonces, describió a Craft como una mujer inteligente y políticamente conectada.
El esposo de la embajadora designada, Joe, es presidente de la segunda más grande productora de carbono en el este de Estados Unidos, cuyos intereses contrastarían radicalmente con la política liberal de Trudeau que está impulsando a las provincias a reducir su consumo de carbón, como parte de su política contra el cambio climático.
Asiduo crítico de las políticas ambientales del ex presdiente Barack Obama, el millonario Joe Craft puso un slogan a su vehículo con la leyenda “Amigos del carbón”.
“Es claro que en cuando a la política ambiental Canadá y Estados Unidos tienen una perspectiva diferente en estos momentos y la tarea de la nueva embajadora será encontrar los aspectos en común de ambos países y construir a partir de ello, y eso es lo que hará”, confió Maryscott Greenwood, presidenta del Consejo de Negocios Canadá-Estados Unidos.