Las fuerzas independentistas conservan la mayoría en el Parlamento de Cataluña, tras sumar 70 escaños. (ARCHIVO)
Y el gran perdedor fue el presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, quien con la aplicación del artículo 155 de la Constitución convocó a unas elecciones en Cataluña, en las que las fuerzas independentistas conservan la mayoría en el Parlamento de Cataluña, tras sumar 70 escaños.
Aunque en los comicios celebrados ayer se impusieron, en número de votos, los liberales constitucionalistas de Ciudadanos, encabezados por Inés Arrimadas, no podrán gobernar al no sumar el número de escaños necesarios en el Parlamento.
Unos 5.5 millones de catalanes estaban llamados a las urnas, y lo hicieron con una participación récord de más del 81%, para elegir al nuevo Parlamento autonómico, en unos comicios convocados el 27 de octubre por el gobierno español para restablecer la legalidad constitucional después de que esa Cámara regional aprobara una declaración ilegal de independencia.
Según los resultados oficiales provisionales, la suma de los tres partidos que defienden la independencia: Junts per Cataluya, encabezado por el expresidente Carles Puigdemont; Esquerra Republicana, del exvicepresidente Oriol Junqueras, y los antisistemas de la CUP, suman 70 escaños, dos por encima de la mayoría absoluta necesaria para formar gobierno.
El Partido Popular de Rajoy fue el más castigado en las urnas, y el expresidente catalán Puigdemont, huido de la justicia en Bruselas, aseguró que, en vista de los resultados, "es necesaria una rectificación, una reparación y una restitución" del gobierno catalán cesado. "La república catalana ha ganado a la monarquía del 155", dijo.
