CEn realidad, no hay palabra, que signifique lo contrario a corrupción. Normalmente los adjetivos tienen un antónimo directo: libre - esclavo, rico - pobre, tacaño - generoso, etc.
Pudiera ser "corrupción - honestidad", pero ésta tiene un connotado mucho más amplio. "Corrupción - Estado de Derecho", lo mismo, la realidad a que hacen referencia es más amplia, "corrupción - legalidad", etc. Corrupción no tiene antónimo, no lo hemos inventado. No hay palabra para designar ese deseable estado de cosas articule nuestras relaciones como sociedad.
La causa tiene que ver, probablemente, con la imposición del imaginario que hace relación con la época de las cavernas, el autoritarismo, el caos, la irracionalidad. "Ojo por ojo, diente por diente", una ley que nos puede parecer muy primitiva fue, en su momento, un gran avance civilizatorio. La ley de Talión fue la creación social para proporcionar al agraviado una revancha proporcionada y justa.
Si el agravio fue el robo de una vaca, entonces el agraviado tenía derecho a robar "sólo" una vaca, de ninguna manera cabía ya quemar la casa, matar a la familia y quedarse con la totalidad del ganado. Únicamente se tenía derecho a una revancha en la misma proporción al agravió sufrido.
Hoy no es diferente, nuestras relaciones sociales continúan siendo totalmente primitivas. Gobernadores prófugos unos y bajo sospecha los otros. Porque la corrupción cuesta mucho al país y al ciudadano particular. No hay "datos duros" de ello, se ha invitado a hacer cálculos, pero no los hay. La corrupción pasa por todos los niveles. A los políticos profesionales les encanta escudarse en aquello de "la corrupción somos todos", "la corrupción es cultural" para justificar las propias fechorías a la luz de legislaciones entre cortas y obsoletas.
En este contexto se ha generado una discusión más amplia en el tema, la sociedad mexicana, a través del Congreso de la Unión, ha echado a andar el Sistema Nacional Anticorrupción.
En Coahuila, la legislación también está en proceso de empatarse. El Congreso del Estado nombra una comisión para atender los procesos legislativos relacionados con el tema de la corrupción, la comisión se reúne la noche del martes 27 de junio, en privado y a puerta cerrada, para abordar la Iniciativa de Ley del Sistema Estatal Anticorrupción. A este hecho irracional, autoritario y primitivo se añade que la iniciativa tiene ya fallas de origen, el gobernador la envía implementando un mecanismo para bloquear la participación ciudadana en el nombramiento del fiscal estatal anticorrupción, situación denunciada por 109 organizaciones civiles que se presentan como bloque para hacer valer su postura.
El gobierno, la sociedad civil, el capital no son enemigos entre sí, son elementos constitutivos de la sociedad. En ese sentido, debería actuar en consonancia y caminar hacia el mismo rumbo, pero mientras eso ocurre, mientras nos hacemos civilizados, debemos entender que la corrupción es su modo ordinario de operar, que cada uno de los actores sociales tiene sus propios intereses, bien definidos y delimitados. Mientras tanto, éste es un juego de poder, no de buenos.
