Crónica gomezpalatina
Continuamos el relato de sucesos importantes registrados a mediados del siglo anterior, iniciando con los más trágicos acontecimientos que afectaron terriblemente a los habitantes de nuestro municipio. El primero fue la explosión ocurrida en la Fábrica de Dinamita, ubicada en el poblado del mismo nombre y acontecida el 31 de julio de 1947, en la que murieron varias personas, causando un gran dolor por la invaluable pérdida de gente muy apreciada por su comunidad y un sentimiento de dolor y aflicción en esa vecina población. Casi enseguida, se presentó el segundo desastre, como consecuencia del dramático incendió que casi acabó totalmente con el mercado Baca Ortiz, y con el patrimonio de muchos modestos comerciantes gomezpalatinos, ocurrido el día 13 de agosto del mismo año, situación muy penosa y delicada que trajo serias consecuencias, al tener que instalarse los locatarios al frente y a los costados de ese inmueble durante tres años, hasta que se construyó el nuevo parián denominado Mercado "José Ramón Valdez", en honor al gobernante de nuestra entidad que apoyo su construcción, misma que aún presta servicios a la ciudad.
Pasaron 8 años, para que de nuevo nos llegara otra tremenda tragedia de la explosión de Guayuleras, acontecida al anochecer del 23 de septiembre de 1955, y en la que se vieron involucrados dos camiones rabones cargados de explosivos, que procedían de la ya mencionada factoría de Dinamita, y los cuales comúnmente se estacionaban a un costado del crucero de las vías, a la salida de la ciudad, en el sitio llamado Guayuleras, esperando que llegara la noche para poder continuar su marcha, ya que la carga con materiales inflamables no estaba permitida para que circulara de día. Por causas que nunca quedaron debidamente aclaradas, al llegar al lugar señalado, el tren de pasajeros de los Ferrocarriles Nacionales de México, se suscitó la terrorífica explosión, ya que las más de diez toneladas de dinamita que llevaban ambos camiones, explotaron violentamente con un colosal destello y un enorme estruendo que fue escuchado en las ciudades y rancherías aledañas a Gómez Palacio, provocando una gran conmoción y un gran caos momentáneo al no conocerse las causas del desastre que tuvo un elevado saldo rojo de muertos y heridos, y múltiples daños de consideración.
Sin embargo, el momento más dramático que afectó a todos los poblados ribereños y las ciudades que se encuentran cerca del cauce de los ríos Nazas y Aguanaval, fue el ocasionado por las inundaciones del mes de septiembre de 1968, que dejaron damnificadas a más de cien mil personas y se convirtieron en la más grave y cuantiosa emergencia enfrentada por los habitantes de la comarca Lagunera en toda su existencia. Al iniciar el mes citado, el optimismo era desbordante, se contaba con suficiente almacenamiento en la presa El Palmito y entre tanto se terminaba la construcción de la presa Zarco.
Pero el día 10 de septiembre, el nivel máximo ya estaba siendo rebasado, por lo que se dispuso que se abrieran los túneles a fin de regular la salida de excedentes que abrían de desembocar en la Laguna de Mayrán. La lluvia continuaba cayendo a torrentes y la situación se complicaba día a día, castigando a la población y causándole daños incalculables. Pero la tragedia mayor estaba por presentarse, pues la tarde-noche del día 15 de septiembre, el agua empezó a inundar colonias del sur y del oriente de Gómez Palacio, continuando su ruta destructora y desde luego la incontenible evacuación de miles de pobladores en La Laguna de Durango y Coahuila, lo que obligó a decretar la emergencia en su totalidad. La verdadera y grave dimensión de ese suceso, se conoció hasta dos meses después de la inundación, cuando la Dirección Nacional de Aeronáutica y del Espacio, de los Estados Unidos (NASA), por medio de sus satélites, había detectado que las torrenciales lluvias caídas sobre la cuenca del río Nazas, hicieron peligrar seriamente a las ciudades laguneras.
Pero también los gomezpalatinos tuvieron momentos gratos y ocasiones muy propicias para manifestar la alegría y felicidad que los identifica, disfrutando de la música popular, el arte y la cultura. Por la década de los 40´s surgieron orquestas de primera calidad, como las de los maestros Cuco Mesta y Enrique Unzueta que amenizaban los mejores acontecimientos sociales laguneros, que años más tarde se incrementaron con las orquestas de Quico Sáenz; Julián Méndez; Los Pandava; La Comparsa Estudiantil y Los Yenkas, entre los más reconocidos conjuntos musicales. Compositores de grandes éxitos como: "Güicho" Cisneros; Felipe Padilla; Tina Gamboa y los excepcionales cantantes de ópera: Pina Carrillo y David Portilla. Los trovadores populares como: Manuel Segovia; Chago Díaz; María Elena Salazar; Nadia del Rivero; Marco Polo Rojas; Miguel Adame; Pablo Lira; Adán Ochoa; Jaime Martínez; Camilo Salazar; Pepe Chacón; Jaime y Lorena Moncada; destacando a nivel internacional, la afamada pianista Claudia Angélica Machuca Toscano, haciendo entre todos una pléyade de relevantes personajes de la música que sobresalieron plenamente.
La iniciativa del gobernador del estado, Lic. Francisco González de la Vega, de crear un parque industrial, dio óptimos resultados, al habilitarse los terrenos necesarios y dotarlos de todos los servicios requeridos para su funcionamiento. Logró que Petróleos Mexicanos construyera grandes instalaciones y un oleoducto para abastecimiento, con suficientes tanques de almacenamiento para sus diversos productos, a fin de poder abastecer las necesidades de la zona norte centro del país. También se consiguió que la Comisión Federal de Electricidad estableciera las oficinas generales para la División Norte, y las bodegas y patios de los Almacenes Nacionales de Depósito. A partir de esas iniciativas, se empezaron a instalar grandes factorías propiciando el comienzo de una etapa de desarrollo, que reforzada por el gobierno estatal del Dr. Héctor Mayagoitia Domínguez, y el activismo empresarial de don Carlos Herrera Araluce, permitieron el exitoso despliegue industrial para Gómez Palacio, constituyendo uno de los grandes pilares de la economía regional que hasta la fecha ha dado excelentes resultados.
Las cuestiones artísticas y culturales se han visto favorecidas con el funcionamiento de instituciones creadas con tales fines, mismas que han resultado de bastante beneficio para la comunidad en sus diferentes espacios, ya que se cuenta con el Teatro Alberto M. Alvarado, y su anexo, el Centro de Convenciones "Francisco Zarco"; La Casa de la Cultura, con su Teatro "Dolores del Río" y el Museo de Arte Moderno; El Centro de Seguridad Social del IMSS; además de los amplios espacios que ofrecen las instalaciones de la Feria de la Ciudad, entre otros sitios, lo que ha favorecido la participación de los habitantes, en materias culturales. En el terreno educativo se cuenta con varias universidades, incluido el núcleo universitario; instituciones tecnológicas; escuelas de estudios superiores; de preescolar, primaria y enseñanza media, que sin lugar a dudas, han elevado las posibilidades de adquirir conocimientos a nivel particular y público, en beneficio de la sociedad gomezpalatina.
Las actividades comerciales en Gómez Palacio han adquirido un alto grado de modernidad y de comodidad, ya que se cuenta con acreditadas cadenas de tiendas departamentales que funcionan en locales cómodos y apropiados, con espacios muy amplios para prestar servicios a su clientela. Esos negocios están distribuidos en lugares estratégicos de la ciudad para aprovechar los mayores volúmenes de consumidores. También se cuenta con una Central de Abastos, de grandes dimensiones, en la que los productores agropecuarios locales pueden expender sus cosechas, y los habitantes, a su vez, adquieren los alimentos y demás bienes de consumo que allí se venden a precios accesibles, sin necesidad de realizar grandes desplazamientos. En lo que se refiere a los servicios de sanidad, existen varias clínicas del Seguro Social que atienden a las familias de los derechohabientes del sector laboral empresarial y los trabajadores que dependen del sector público, cuentan con los servicios del ISSSTE. Para atender a la población abierta, están los Centros de Salud, el Hospital General y clínicas de carácter particular. También existe el Seguro Popular, que es un programa que atiende a la gente de bajos recursos, con lo que se cubre ese delicado renglón, tan vital para toda la comunidad.
Al finalizar las crónicas dedicadas al 111 aniversario de la fundación de Gómez Palacio, Dgo., hemos pretendido dar a los lectores una sencilla visión de una parte de los acontecimientos que constituyen nuestros antecedentes históricos, recordando un número relativo de hechos y situaciones acontecidas en esta tierra, que ya forman parte de su acervo, en las que se ponen de manifiesto los esfuerzos y sacrificios de sus habitantes para hacer un lugar de convivencia, armonía y tenacidad, para vencer todas las problemáticas que se les han presentado en los diferentes tiempos y circunstancias que les ha tocado vivir, entre las que se encuentran hechos lamentables, momentos trágicos, actos emotivos y heroicos, peligros inminentes; actos de grandeza y superación, que han contribuido a forjar el carácter de los gomezpalatinos como gente solidaria, compartida y comprometida, enfrentando los tiempos malos con entereza y fortaleza, al igual que a plenitud, las ocasiones de contento y alegría. Ojalá que el Creador nos permita continuar por un camino de justicia, paz y amor, para que toda nuestra gente llegue en unidad a las mejores fronteras de la superación y la fraternidad.
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