CRÓNICA LERDENSE
La primera década del Siglo XX fue el nacimiento de la nueva arquitectura aplicada en la construcción de los Chalet de Lerdo, de los cuales nada más en esta ciudad se lograron construir 5 edificios de su especie, pero también algunos con la misma característica en la ciudad de Torreón, viéndose frustrada su edificación por motivos del brote revolucionario en 1910 en Ciudad Jardín y en Gómez Palacio, que resultaron perjudicadas por la inseguridad de los insurrectos contra el régimen de Porfirio Díaz y, por la prolongación de la guerra un numeroso grupo de lerdenses tuvieron que emigrar a otros lugares buscando la paz y la tranquilidad, razón por la cual las familias completas de Lerdo abandonaron sus casas habitación quedando completamente desoladas a consecuencia de las tomas de la ciudad por parte de los maderistas primero, villistas o los carrancistas.
En tal virtud la familia Gorosave Pámanes analizó la problemática y se trasladó a la Ciudad de México, radicando en una casa de la calle Primera de las Artes. Y por lo tanto deciden vender su lujoso Chalet en el año de 1919 a la Sra. Concepción de la Peña de Villar adquiriendo el edificio y las caballerizas que se encontraban enfrente de la finca. La compra del Chalet fue asistida por su esposo don Adolfo Villar, de nacionalidad española, casado, de 38 años de edad, con ocupación minera.
El precio que pagaron por la finca ascendió a la cantidad de 20 mil pesos oro nacional, la compra se realizó de acuerdo con escritura formulada en la Ciudad de México, el 25 de febrero de 1919, ante el notario público licenciado Eduardo Elizondo.
Por ser de nacionalidad española la Señora Concepción de la Peña de Villar y con edad de 32 años, solicitó a la Secretaria de Relaciones Exteriores una autorización para la naturalización para ser de nacionalidad mexicana y así poder adquirir los bienes expresados, de acuerdo como lo mandaba la Constitución mexicana en su artículo 27, habiendo renunciando a sus derechos como extranjera para convertirse en mexicana en este caso en calidad de propietaria de los mencionados inmuebles. Debido a la situación que prevalecía en la postrevolución donde no existían fuentes de trabajo y las actividades económicas eran raquíticas. En ese sentido la Sra. Concepción de la Peña de Villar distinguida dama de la sociedad lerdense en su carácter como propietaria del Chalet Gorosave hipotecó la propiedad para garantizar un préstamo por la cantidad de 5, 000 mil pesos al 3 ¼ mensual de réditos, otorgado el 7 de julio de 1920 por el Sr. Don Manuel Ortega y R., quien era soltero, de profesión abogado y vecino de Torreón, Coah.
Al llegar a su vencimiento el préstamo hipotecario de referencia no pudo ser cubierto el capital y los intereses por la familia Villar de la Peña, y al no contar con dinero se vio en la imperiosa necesidad de entregar el Chalet y las caballerizas al Sr. García, el 10 de octubre de 1922, traspasándole la propiedad del inmueble para pagar el préstamo otorgado de 20 mil pesos, y los intereses que en todo ese tiempo se acumularon en la cantidad de 8 mil pesos oro. Después de haber disfrutado la propiedad por trece años el Sr. Manuel García y R. vende las propiedades al Sr. Anastasio Benavides, el 26 de diciembre de 1932. A los pocos años el Sr. Benavides el 14 de octubre de 1935 enajena las fincas por préstamo concedido por la Sra. Dolores Rea Vda. de Ulloa. Al no pagar el crédito el Sr. Benavides la Sra. Rea recurre al juez de primera Instancia licenciado Genero Rafael Mijares, quien le da posesión de la finca por medio de juicio ejecutivo mercantil por 6 mil pesos, misma Sra. Dolores Rea Vda de Ulloa, vende la propiedad al Sr. Salvador Meade Fierro el 17 de abril de 1937, en ese entonces el Sr. Meade con domicilio en Galeana No. 406 sur de Ciudad Lerdo, Dgo.
Inmediatamente el citado Juez de Primera Instancia como Notario, da fe de la venta del Salvador Meade Fierro, y con autorización de su esposa Otilia Zataráin, el 20 de abril de 1937 da en venta el Chalet al Ingeniero minero y médico Homeópata, Pascual Hernández Rivera, en un precio de 5 mil doscientos pesos, pasando así hacer el hogar de su familia. Además de acuerdo con su profesión como médico homeópata adaptó una sala para consultorio donde atendía a numerosos pacientes de Lerdo, de Gómez Palacio, Torreón y San Pedro Coah. Los enfermos de estas ciudades se trasladaban en el tranvía eléctrico que tenía su tendido de vías por la calle Francisco I., Madero, donde este tipo de vehículo tenía parada especial enfrente del Gorosave.
Al fallecer el ingeniero Pascual Hernández Rivera, disfrutaron por mucho tiempo la regia casona sus hijas Eugenia y Concepción Hernández Román, quedando como propietaria de la finca ésta última y al haber quedado sola al morir Eugenia, Concepción se fue a vivir a Torreón con su hermano el Dr.
Pascual, poniendo de inmediato en venta el Challet. Al darse cuenta de la intención de la familia Hernández, los dirigentes de la Fundación Lerdo Histórico, asociación que promueve la protección y rescate de los monumentos históricos y con la representación del Jorge Vargas Fausto como presidente regional de la FLH en el 2004, convence a la familia Hernández representada por María Concepción, para que no lo vendieran a otras personas que no fueran de Lerdo, para lo cual formalizaron un convenio para que esta asociación civil lo pudiera adquirir, pero por situaciones técnicas y de tiempo no se logró la transacción.
Fue entonces que el Presidente de Lerdo Histórico promovió la compra del Chalet Gorosave ante la Administración Municipal del periodo 2004-2007, quienes estuvieron de acuerdo; primero se convino un convenio con los propietarios en el año del 2005 para rentarlo con miras en un futuro adquirirlo definitivamente para que pasara a ser un bien inmueble del municipio.
En ese año fue restaurado en una primera etapa, rehabilitándose el sótano en forma total y en el segundo nivel los pisos de duela. En una segunda etapa en el primer nivel se colocó el piso nuevo de duela algunos cuartos y pasillo. Además, la barda antigua en forma de redondel del antiguo coso taurino que limitaba al sur del Chalet, se demolió en virtud de que ya se encontraba muy deteriorada y a punto de derrumbarse, la cual se recuperó con los mismos materiales de adobe, aplanado de mezcla de cal y arena.
El histórico edificio del Chalet Gorosave forma parte del inventario de patrimonio cultural arquitectónico del Centro Histórico y fue catalogado como Patrimonio Cultural de los lerdenses por el Instituto Nacional de Antropología e Historia, con el número 100120010037. Convirtiéndose en el año de 2005 en un Centro Cultural como Museo de Historia de la Ciudad, montado a base de un guión museográfico con una selección de materiales con temas del porfiriato, la Independencia de México y una exposición de objetos antiguos de la revolución y de otra índole, conformado por una galería de presidentes municipales desde 1917 y salas de exposiciones temporales donde se exhiben algunas muestras culturales.
Aparte del museo aquí se encuentran ubicadas las oficinas de la Coordinación de Eventos Cívicos y Museografía, el Archivo Histórico Municipal y la oficina del Cronista de la Ciudad.
En el 2007 la Presidencia Municipal pagó el último abono de 1 un millón de pesos, del costo total que fue 3 tres millones en ese tiempo, pasando así la propiedad al patrimonio Municipal de los lerdenses.
Tomando como fondo la entrada principal del Chalet en 2004, María Concepción Hernández Román, Sra. Guerra de Hernández y el Dr. Pascual Hernández R., los acompaña José Jesús Vargas, cronista de la ciudad. Diferentes características de su fachada principal y lateral.
