Sello. Así se veía el sello a unos días de haber sido aplicado. Actualmente ya no es notoria la presencia de este tratamiento.
En la presente administración municipal no se ha realizado ni una sola obra de colocación de sello asfáltico por considerarlo como un acabado poco durable y con deficiencias que distan de cumplir con las necesidades de mejora del pavimento de las calles.
Este tipo de obra sí fue ejecutada en la pasada administración y costó varios millones de pesos, pero fue motivo de inconformidad ciudadana.
El sello o "slurry" es una mezcla compuesta de emulsión asfáltica y otros aditivos, básicamente es una capa de material triturado como la piedra caliza con un aglutinante, aplicado sobre la superficie del pavimento.
No obstante en lo que va de la administración, no se ha hecho un solo trabajo en alguna calle de Lerdo con este método.
"No hemos hecho nada de eso, no lo contemplamos y no lo consideramos conveniente porque las calles requieren de más trabajo, esto sirve en algunos casos, pero considerando el estado actual de las calles no es de mucha ayuda, no dura", explicó el director de Obras Públicas del municipio de Lerdo, Juan José Jiménez Varela.
Hace un año, en la pasada administración, se colocó en algunas calles el sello, pero se desmoronó y hubo muchas quejas. En ese entonces la Dirección de Obras Públicas, a cargo de Arturo Rodríguez de León, solicitó al constructor hacer un barrido manual y reconoció que el "slurry" tenía una vida promedio de un año, asegurando que el objetivo era prevenir daños en capas profundas del asfalto.
"La instrucción que tenemos de la alcaldesa es hacer las cosas bien. En muchos casos ya hay daño en las capas profundas y ahí el sello no nos sirve", dijo Jiménez Varela.