Divide a Suecia política de inmigración tras el ataque
Los suecos se encuentran divididos sobre las hospitalarias políticas de inmigración del país dos días después de que un solicitante de asilo de Uzbekistán presuntamente mató a cuatro personas en el ataque extremista más letal en Estocolmo en años.
La capital sueca recuperaba lenta, pero resueltamente su ritmo normal conforme surgían detalles sobre el sospechoso de 39 años. La policía reveló que en diciembre se le ordenó al hombre abandonar el país luego que su solicitud de un permiso de residencia fuera rechazada seis meses antes. En lugar de ello, al parecer se ocultó y eludió los intentos de las autoridades para rastrearlo y deportarlo, hasta que un camión de reparto de cerveza que había sido robado atropelló a varias personas en una calle peatonal y terminó dentro de una tienda departamental de lujo el viernes con él al volante.
"Me genera frustración", dijo el primer ministro Stefan Lofven a la agencia de noticias sueca TT el domingo. Las autoridades sabían que el presunto atacante, que se encuentra detenido bajo sospecha de cargos de terrorismo, "era simpatizante de organizaciones extremistas", de acuerdo con Jonas Hysing, de la policía nacional sueca.
Una segunda persona fue arrestada el domingo por los mismos cargos potenciales, y otras cuatro están retenidas por la policía; ninguna de ellas ha sido identificada.
Funcionarios de seguridad en la vecina Noruega, donde un solicitante de asilo ruso de 17 años fue detenido el domingo en relación a un artefacto explosivo hallado cerca de una estación del tren subterráneo, hablaron sobre el alarmante potencial de un efecto de emulación.
La agencia de seguridad noruega indicó que no estaba claro si el adolescente planeó realizar un ataque con el primitivo artefacto de fabricación casera.
Miles de personas se concentraron ayer en la céntrica plaza Sergel y sus inmediaciones, a pocos metros del escenario del atentado del viernes en Estocolmo en el que murieron cuatro personas, para enviar un mensaje de esperanza y de paz.
ENVÍAN AMOR
Åhléns, la principal cadena de grandes almacenes en Suecia, decidió ayer posponer hasta hoy la reapertura de su tienda en la zona peatonal de Estocolmo, objeto de un atentado hace dos días, y no vender a precio reducido los productos dañados, como había anunciado, tras las críticas recibidas.
"Queremos pedir disculpas a nuestros clientes por una mala decisión", señaló en un comunicado la compañía, contra cuya tienda se estrelló un camión después de recorrer cientos de metros por una zona peatonal y atropellar a varias personas, lo que causó cuatro muertos y diez heridos, varios de ellos muy graves.
Åhléns informó ayer a sus clientes en un correo electrónico que reabriría hoy una parte de la tienda a las 11:00 hora local, una vez que la policía levantara anoche el cordón de seguridad sobre la zona, y que iba a liquidar a mitad de precio productos dañados por el humo provocado por el atentado.
El mensaje desató numerosas quejas en las redes sociales contra la "avaricia" de la cadena, lo que provocó que Åhléns enviara después un comunicado hablando de malentendido, aunque mantenía su decisión de vender los productos apelando a sus "valores", como trabajar por la "sostenibilidad".
Víctima
Entre las víctimas del ataque en Estocolmo:
⇒ Estaba Chris Bevington, ejecutivo de Spotify.
⇒ A través de su cuenta de Facebook, Daniel Ek, fundador del servicio de streaming, confirmó el deceso de su compañero.
⇒ Bevington era inglés y tenía 41 años.