El animal ya fue adoptado por otra persona. (INTERNET)
Unos crueles dueños le pusieron un tubo de plástico a su mascota en lugar de un tradicional ‘collar para perro’. Como resultado, el animal casi muere estrangulado.
Afortunadamente fue rescatado por Ovidiu Rosu, un veterinario que vive en la ciudad de Bucarest en Rumania.
El hombre vio al canino por la calle, luego de que alguien le avisara lo que sucedía, y notó que algo estaba mal. Para acercarse tuvo que inyectar al animal un tranquilizante y entonces retiró el tubo de plástico que rodeaba el cuello del perro, que en consecuencia sufría de moretones, hinchazón y cortaduras.
“Por lo que se puede ver, el perro ha tenido el tubo alrededor de su cuello desde que era cachorro. De alguna forma, alguien pensó que esto sería gracioso y el animal ha tenido que crecer así”, señala este hombre.
El animal se encuentra recuperándose, mientras que ha sido adoptado por la mujer que alertó al veterinario por ayuda.

