Negociación. El acuerdo para la evacuación del valle de Barada se alcanzó poco después de la celebración de conversaciones entre el Gobierno sirio y la oposición en Astaná.
Rebeldes y civiles empezaron a salir de la estratégica zona del valle del río Barada, a las afueras de Damasco, después de que las fuerzas gubernamentales se hayan hecho con el control de la región donde se ubica el manantial que abastece de agua la capital siria.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos informó ayer que cientos de combatientes y sus familias, así como otros civiles que han decidido abandonar la zona, comenzaron a marcharse hacia la provincia de Idleb, en el norte de Siria, a bordo de autobuses.
Unas dos mil personas van a ser evacuadas del valle de Barada en virtud del acuerdo alcanzado ayer entre los rebeldes y las autoridades sirias, facilitado por Rusia y el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR).
Los evacuados están siendo trasladados en 50 autobuses, además de ambulancias para los heridos, detalló el Observatorio.
El gobernador de la provincia de Rif Damasco, Alá Ibrahim, declaró a la agencia de noticias oficial siria, SANA, que el acuerdo contempla la evacuación de los combatientes que no sean originarios del valle hacia Idleb, mientras que los que quieran quedarse tendrán que regularizar su situación legal. Asimismo, establece la entrega por parte de los combatientes de sus armas pesadas y su retirada total de la zona, que se efectuó ayer, según el Observatorio.
Uno de los puntos principales del pacto es el acceso de las fuerzas gubernamentales para el desminado de las instalaciones del manantial de Ain al Fiya, así como su reparación, ya que este abastece de agua la capital siria, Damasco. Ayer, el ejército sirio se hizo con el control de toda el área y del manantial, y tras la entrada de las tropas a la zona llegaron también los operarios destinados a reparar la planta de bombeo de agua.
Esta ha estado fuera de servicio desde el pasado 23 de diciembre, lo que provocó el corte del suministro de agua en Damasco desde esa fecha, por lo que su reconquista era clave para el régimen. Ayer, el comando general del Ejército sirio anunció que había devuelto la estabilidad y la seguridad a las aldeas y los pueblos del valle del río Barada, tras "una serie de operaciones militares exitosas".
"Las operaciones militares y del Ejército en el valle del Barada contribuyeron a crear las condiciones adecuadas para llevar a cabo los logros de las reconciliaciones".
