Costosa. Las casas de empeño son una opción que puede resultar costosa a largo plazo. (ARCHIVO)
Empeñar es quizá la alternativa más común para obtener rápido financiamiento para quien quedó endeudado por las vacaciones y el regreso a clases, pero también puede salir más caro de lo que se imagina.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financiero (Condusef) alertó que los préstamos de algunas casas de empeño son muy caros, por lo cual no está de más checar otras opciones para un préstamo personal, de nómina o una tarjeta de crédito.
No obstante, si después de un análisis el empeño es la única opción, aconsejó comparar y no dejar las prendas en la primera casa de empeño, sino darse tiempo para elegir la que más liquidez ofrezca, con una tasa de interés baja.
REVISAR LAS TASAS DE INTERÉS
Además, checar la tasa de interés anualizada, pues algunas casas de empeño manejan tasas muy elevadas, advirtió el organismo en su publicación "Consejos para tu bolsillo".
Recomendó preguntar por el porcentaje de avalúos que prestan, pues es una obligación de la casa de empeño informar claramente antes de firmar el contrato.
En caso de no recuperar la prenda y ésta sea vendida, también hay que consultar la demasía, que es la diferencia entre el valor de la venta y el costo de la dependencia que las casas de empeño deben darle a los pignorantes.
La Condusef sugirió preguntar sobre los refrendos, es decir, a cuántas renovaciones se tiene derecho y el aumento del plazo establecido para recuperar la prenda.