A partir de la dureza del presidente Trump y la lentitud o sigilo por parte del nuestro Gobierno en sus reacciones, se han multiplicado las marchas de protesta por tanta agresión, no solo en nuestro país sino además en diversas poblaciones de Estados Unidos; en nuestro caso éstas han unido a nuestra sociedad como un cauce que nos permite manifestarnos pacíficamente, pero activarnos y sumar esfuerzos dentro de nuestras propias trincheras para defender la dignidad y soberanía de nuestro país.
Es innecesario entrar en detalles ya que es el tema de cada día, pero desespera la lenta reacción del Gobierno ante el embate que en materia migratoria, del TLCAN y desde luego el muro, ya que no llegamos a conocer el resultado de las pláticas iniciales entre principalmente el canciller Videgaray y el secretario de Economía Guajardo, con los representantes oficiales en Estados Unidos que por cierto en alguna forma, desalientan también por las noticias que conocemos del trato recibido en estas entrevistas, a talgrado de que los mismos medios de comunicación y politólogos no se ponen de acuerdo en los resultados de si dichas conversaciones aún cuando no sean oficiales, incluso las telefónicas entre los dos presidentes si han sido tersas o escabrosas.
La realidad es que las acciones iniciales del presidente Trump incluso a contracorriente de los propios poderes constitucionales en dicho país, lo están llevando a fuertes confrontaciones que sin embargo, no impiden que dentro del accionar en las medidas que a través de decretos emite hay una completa y decidida agresividad contra otros países y desde luego con el nuestro que se resienten por nuestra cercanía geográfica y dependencia económica.
Sin embargo, el enfoque de mi artículo pretende hilvanar dos aspectos significativos de los problemas que tradicionalmente en este año estamos enfrentando: el proteccionismo que pretende imponer Trump, ya que no podemos confiar en lo que las propias leyes de su país le impidan realizar pues en estos últimos días hemos sido informados por los medios de comunicación, de las redadas de migrantes, mientras que de nuestra parte sólo vemos discursos de fortalecer nuestros consulados y en nuestro país diversas voces de que estamos listos para recibir a nuestros connacionales repatriados, sin conocer a fondo el problema social y económico que se nos viene además de la parte migrante de los centroamericanos; de la misma manera al parecer estamos esperando las rondas de trabajo para renegociar el TLCAN confiados en que se tardará unos meses para si es el caso de una posible salida de los Estados Unidos, para que su Congreso lo apruebe y en el últimos de los casos respaldarnos en las reglas sobre esta materia por parte de la Organización Mundial de Comercio OMC; desde mi punto de vista lo que requerimos es al menos que se nos dé a conocer sin violentar la confidencialidad de estos casos no entrevistas en lo general, los compromisos que nos den certeza de acciones unilaterales y una agenda de nuestra posición firme en estos temas, para conocer la ruta que seguiremos.
El otro punto es global, me pregunto qué pueda pasar con las políticas que pretende llevar a cabo el presidente Trump y al mismo tiempo su acercamiento con Rusia por la simpatía que aparentemente siente por Putin, las primeras conversaciones con la primer ministro de Inglaterra por el "Brexit" y por último si gana las elecciones Marine Le Pen candidata de la extrema derecha en Francia con quien al parecer ya cambió impresiones por vía telefónica… ¿un muro para imponer nuevas reglas económicas en el mundo?
Desafortunadamente me falta espacio para comentar el reciente incremento en la tasa de referencia por parte de Banxico, la inflación y finanzas públicas que abordaré la próxima semana.