Capitalismo
Es increíble como la inmensa mayoría de las personas desconoce la esencia del capitalismo; entendido éste como libre mercado y un “dejar hacer, dejar pasar”, por parte de las autoridades. El gobierno a gobernar y a crear las condiciones para que se desarrollen las actividades económicas con mínimas regulaciones. En el siglo antepasado y principios del pasado se intentó con éxito en los Estados Unidos, pero paulatinamente se fue abandonando. Me causa asombro que actualmente se considere capitalista e imperialista a los Estados Unidos, cuando en los últimos ocho años se implementaron más medidas socialistas que capitalistas. (Entre otras el Obamacare).
Sin embargo, y a pesar de los repetidos fracasos, hay muchas personas partidarias del socialismo, que por desgracia, a la larga terminan en un comunismo y en un total control central del gobierno. Esto sucede porque contrario a lo que podríamos suponer y yo incurrí en este error, la mayoría de los que están por el socialismo, son personas buenas y con las mejores intenciones, sólo que en los negocios y en la conducción de un país, se debe emplear la inteligencia y no el corazón.
Mucha gente cae en el error de suponer que si una idea o un sistema “tiene” buenas intenciones hay que practicarlo aunque no funcione. Hemos caído en el error de darle crédito a escritores, actores, deportistas y en general gente “célebre” para que opine de economía y de política. A mí me han preguntado, en Estados Unidos que si no quiero que los “niños pobres” tengan casa, comida, vestido y una educación digna y en seguida me doy cuenta que es inútil esta discusión, puesto que no importa lo que yo quiera, ni lo que él quiera para lograr que estos niños tengan lo que necesitan.
El fondo del asunto radica entre los partidarios de que el gobierno se encargue de todo, “de la cuna a la tumba” y los que quieren que el gobierno propicie los medios para una economía de mercado y no se meta a empresario, ya que como empresario fracasa en todos los aspectos y en todos los países (hay un motivo para esto, pero no quiero extenderme ni desviarme), simplemente véase Pemex, CFE, Seguro Social, etcétera.
Para terminar, resulta curioso que se culpe al imperialismo y al capitalismo de todos los males y por otra parte se piense que se puede implementar un socialismo que funcione, cuando ha fracasado en todas partes y para colmo, mientras que un sistema libre si no funciona se vota para cambiarlo, cuando el socialismo está muy avanzado, es imposible cambiarlo o al menos muy difícil, por la sencilla razón de que el precio que hay que pagar para que el gobierno se encargue de todo es la pérdida de la libertad y recobrarla es casi imposible.
Espero haber sido claro y aunque no tengo muchas esperanzas de ver un capitalismo funcionando, cuando menos, menos regulaciones, menos trabas, menos impuestos y más competencia sí.
Raymundo Portilla,
Torreón, Coahuila.
