Agua subterránea: Asunto olvidado (¿o vetado?)
Las campañas políticas están a todo lo que dan en el estado de Coahuila y desde luego en nuestra Comarca Lagunera. Movilizaciones partidistas, propaganda impresa de todo tipo, mantas, bardas pintadas, promesas de hacer las cosas bien en beneficio de la sociedad (promesas), regalos a las clases desprotegidas (léase “compra y coacción del voto”) abrazos y apapachos a la gente humilde, cargar en brazos y dar besitos a los niñosbesitos a los niños con sus respectivas fotos, etc., etc.
Pero en todo éste barullo de discursos en los que los candidatos se afanan en relatar y describir las necesidades de la población y se hacen promesas de solución al respecto, hay un tema vital que no se toca: la sobreexplotación del agua subterránea en la cual se sustenta la vida presente y futura de nuestra Comarca Lagunera, asunto que autoridades y políticos no aluden porque “no es políticamente correcto”. Aún en los inútiles “debates” a la que concurren presurosos los candidatos, la agenda no incluye éste tema vital. No conviene dado que en esto intervienen intereses económicos y políticos enormes y en nuestra región como en el resto del país, lo que vale es el dinero, no la sustentabilidad ambiental futura de nuestra Comarca. El agua subterránea de La Laguna es un tema tabú en todos los sentidos y todos sabemos porqué.
Sabido es, porque durante los últimos años así lo ha venido manifestando repetidamente la propia autoridad del ramo (CONAGUA) que nuestro Acuífero Principal pierde de 3.00 a 3.5 mts. anuales de nivel freático. Y se pierden porque no hay forma de reponer ésos volúmenes dado que la recarga natural del acuífero sólo aporta el 50% de lo que se extrae. Para darse una idea del volumen de agua que se extrae del subsuelo lagunero hay que multiplicar la capacidad máxima de la presa Francisco Zarco (380 millones de metros cúbicos) por 3. Es decir, la extracción anual se eleva a más de mil millones de metros cúbicos frente a una recarga de 630 m.m3 (datos oficiales.). La diferencia es lo que ilegalmente se extrae con la complicidad de CONAGUA.
Hay que recordar que la extracción anual autorizada por el Poder Ejecutivo es de sólo 600 millones de metros cúbicos pero como estamos en un país en donde las leyes no se respetan ni hay autoridad para hacerlas respetar, al acuífero lagunero se le extrae más del doble poniendo en grave riesgo a nuestra Comarca Lagunera por efectos de la criminal sobreexplotación que todo mundo conoce pero que nadie de la “clase política” lagunera está dispuesto a plantear porque, repetimos, “no es políticamente correcto”.
En fin, hay que aceptar de muy mala gana que vivimos en una era de simulación en el cual el poder político y económico es el que manda (mangonea, pues) y controla a su antojo y conveniencia los recursos naturales así sea que conlleven un alto riesgo para el futuro. ¡Y que siga la fiesta, la simulación y el despilfarro de recursos públicos en las campañas políticas!
Les envío un cordial saludo. Héctor Astorga.
