Agotamiento del acuífero lagunero ¿más pruebas?
Las autoridades municipales, estatales y federales siguen ignorando el principal problema que acecha la supervivencia de la Comarca Lagunera. Por años se ha venido denunciando la sobreexplotación del acuífero lagunero, pero salvo declaraciones insulsas de las distintas dependencias del ramo, el problema sigue siendo ignorado porque sacarlo al debate público puede afectar los intereses económicos de quienes se benefician abatiendo los mantos acuíferos. Seguimos pues tolerando el abuso de la sobreexplotación aunque ello exponga la viabilidad de toda una importante región.
En estos últimos días, la prensa local (El Siglo de Torreón) da a conocer que el Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento de Torreón, Simas, está por terminar la construcción de 3 pozos más para abastecer el déficit de agua potable que se ha presentado en la llamada Zona Centro de la ciudad. Dicha dependencia informa que uno de los pozos se localizará en la Alameda Zaragoza ya que el pozo existente prácticamente está agotado pues sólo rinde de entre 10 y 15 litros por segundo, pero “en forma intermitente”. Declara el Simas que este pozo originalmente producía 45 litros por segundo. Otro pozo también en construcción se localiza en la Plaza Madero, pero la nota de El Siglo no da muchos detalles del mismo.
El pozo # 41 ubicado en la Alameda Zaragoza estará pronto ingresando en la larga lista de pozos (casi 50) que se han abandonado por “agotamiento” (suponemos que ésas han sido las causas porque el Simasno ha revelado las razones por las cuales se han abandonado dichos pozos y se han tenido que “reubicar”). Se desconoce igualmente la profundidad a la que se están perforando los nuevos pozos, pero los últimos que inauguró el alcalde Riquelme se perforaron a más de 350 metros, muy distinto a la profundidad de los pozos de hace 75 años de no más de 40 metros.
Desgraciadamente el problema del agotamiento no viene solo. Actualmente todos, absolutamente todos los pozos que surten de agua a nuestra ciudad (y seguramente a todas las ciudades y comunidades de la región) están contaminadas de arsénico, molibdeno, plomo y otras sales perjudiciales a la salud. Casi el 50 % de los pozos registra un contenido de arsénico superior a la Norma Internacional. Aún el agua de los pozos que han sido dotados de costosos filtros antiarsénico, registran contenidos de estas sales dañinas y aunque por ahora no representen peligro, nada asegura que en un futuro próximo no estaremos lamentando su contaminación o su agotamiento
Muy conveniente sería que las nuevas autoridades municipales que en unos meses entrarán en funciones, entiendan que lo del agua subterránea es un problema que amenaza seriamente a nuestra ciudad, que tomen nota de ello y se aboquen desde ya a darle solución.
Y a nivel mundial, por lo pronto más y más estudios confirman el “cambio climático” del planeta por el abuso del hombre en la sobreexplotación de los recursos naturales. Ya nadie ignora el tema, ni aún el Sr, Trump. Sin embargo los esfuerzos de los muy acreditados ambientalistas mundiales y locales apenas si son oídos y atendidos pese a que diariamente notamos que nuestro clima “ya no es como era antes”. Pero también a nivel planetario, los grandes intereses particulares se siguen imponiendo y exponiendo a la supervivencia de todo un planeta.
Héctor Astorga
