Por esto se van
Son muchas, sin duda, las razones por la cuales el electorado torreonense se volcó a las urnas el pasado junio, para poner un hasta aquí a la administración que inició mal el actual y cuestionado gobernador electo; y terminó peor, su incondicional alcalde sustituto.
Digo que son múltiples las razones y sólo por mencionar algunas las anoto aquí como botón de muestra: Autotransporte, inseguridad, basura, desempleo, servicios públicos, mantenimiento y equipamiento urbano, corrupción, entre otras.
En esta ocasión me gustaría concentrarme sólo en uno, de la larga lista de temas que deja sin resolver la administración que, afortunadamente, ya se va. El tema al que me refiero es el del autotransporte, la pesadilla del usuario. Cuando hablo del autotransporte estoy considerando las rutas urbanas y las líneas de taxis, en ambos casos el caos reina y la ganancia, como siempre, es para los pescadores.
La calidad en el servicio que nos ofrecen la rutas y los taxis de la ciudad es tan pobre y de tan baja calidad, que no hay otra ciudad en país que se le compare. La impuntualidad en los tiempos establecidos, los modelos de los camiones que circulan por la ciudad, el pésimos mantenimiento de las unidades, la suciedad en los camiones, la falta de capacitación de los choferes y el hacinamiento en el que nos transportan, nos hablan de un contubernio silencioso en donde ganan los dueños de las concesiones, gana la autoridad que voltea hacia otra lado y pierde el usuario o sea la ciudadanía de torreón que a diario requiere utilizar ese medio de transporte.
El tema de los taxis adolece de los mismos males que aquejan a los camiones urbanos, aunque aquí podemos agregar la flexibilidad en las tarifas establecidas, pues aunque todas tengan establecida una tarifa de arranque, resulta curioso ver que una misma distancia tiene cobro diferenciado dependiendo de la línea o del horario. No hay que ser muy observadores para concluir que nadie revisa las unidades de taxis que a diario circulan por Torreón, ya que las condiciones en que circulan no pasarían el examen más laxo de calidad en el servicio.
Si la autoridad hubiera hecho su trabajo de supervisar, vigilar y garantizar que el servicio otorgado el ciudadano en el tema del autotansporte, la gente hubiera hecho una evaluación distinta en las urnas. Pero prefirieron irse con los bolsillos llenos, dejando al Partido que llega la oportunidad de demostrar que con voluntad sí se pueden resolver los problemas que afectan al ciudadano común.
Mis mejores deseos para esta nueva administración comandada por Jorge Zermeño, que llega con todo el respaldo ciudadano y que por la misma razón, la ciudadanía tiene altas expectativas para el Torreón del 2018.
Héctor Almaraz Aguilar
Torreón, Coah.