Histórica. Una película que además narra un episodio crítico de los nazis. (ARCHIVO)
Con funciones de 5:15 de la tarde y 7:30 de la noche, hoy en Cinépolis Galerías, la Muestra Internacional de Cine, proyectada por la Universidad Iberoamericana, presentará la película Francofonía, del director Aleksándr Sokúrov.
Como ya lo hizo en El arca rusa (2002), Aleksándr Sokúrov ha demostrado que un museo es más que un lugar para preservar arte. En esta ocasión, el cineasta ruso visitó el Museo del Louvre para contar un episodio poco conocido de su historia. En la Francia ocupada de la Segunda Guerra Mundial, el director del museo Jacques Jaujard y el militar nazi Franz Wolff-Metternich colaboraron juntos para proteger el patrimonio del edificio ante un posible bombardeo a París.
A través de un dispositivo cercano al cineensayo en el que conviven diferentes capas narrativas que transitan de la ficción al documental, Sokúrov reflexiona sobre la relación entre el arte y el poder.
El popular director, Aleksándr Sokúrov, Estudió Historia en la Universidad de Gorki y en 1979 se graduó del Instituto Estatal de Cinematografía de la Unión Soviética (VGIK). Se incorporó a Lenfilm, sufriendo la censura del régimen de su país. A menudo sin trama, pero con gran énfasis en la estética, sus películas son cercanas a la historia y la naturaleza.
El cineasta ruso huye con Francofonía de toda forma de etiquetado al combinar metraje de archivo de la ocupación nazi, planos, detalle de fotografías y pinturas, planos aéreos del París contemporáneo, algo de animación, encarnaciones espectrales y algo caricaturescas de Napoleón y Marianne vagando por los pasillos del museo y un dispositivo de videoconferencia.
Todo ello está anclado en la reconstrucción de los encuentros entre Jaujard y Metternich, mediante fragmentos que revelan su propio dispositivo "material", al mostrar los arañazos fingidos en la película.
