A la hora de hablar del mundo del trabajo, la atención está puesta en la generación millennial. Los medios hablan una y otra vez de ellos y de cómo están transformando el área laboral, y de cómo el resto de generaciones tienen que tratar a este grupo de jóvenes (nacidos aproximadamente entre 1980 y el 2000) para obtener los mejores resultados y para que ellos no abandonen las organizaciones.
Pero poco se habla de la Generación X. ¿Quiénes son ellos? Nada menos que los que en su mayoría ocupan los puestos de CEO, gerentes generales o directores ejecutivos. Según el estudio "Competencias del Top Management 2017. #ADNCEO", realizado por Hays México, en el país 60% de estos puestos están ocupados tanto por miembros de la Generación X como por Baby boomers (los nacidos en la posguerra).
Así que ellos importan en el lugar de trabajo porque muy probablemente si tienes un jefe, él pertenece a esta generación. O si hoy eres un jefe, eres parte de este grupo de trabajadores que está "atorada en el medio", según define el Pew Research Center en un estudio sobre ellos.
Son una generación "puente" entre los Baby boomers y los millennials, y sus opiniones respecto a temas como política, economía, uso de tecnología y su adopción, también se encuentran entre las de los más grandes y los menores que ellos. Es decir, no son ni liberales ni tampoco conservadores del todo y como su nombre lo dice (X), ellos no se piensan únicos, como sí lo sienten los más jóvenes.
Una hipótesis por la que esta generación tiene "un problema definiendo su personalidad generacional" es que precisamente, rara vez han sido tema de los medios de comunicación, señala el Pew Research Center. En contraste, tanto sus antecesores, los Baby boomers, como los millennials, han sido foco de los medios de comunicación, cada una por sus particularidades y su propio contexto histórico de surgimiento.
LOS QUE ACUÑARON EL BALANCE
Si los Baby boomers (para algunos, sus padres) ponían sobre todas las cosas al trabajo, puede decirse que ellos fueron los que acuñaron el concepto de "balance vida-trabajo".
"Ellos cuestionan las figuras de autoridad de manera natural y son responsables de crear el balance entre la vida y el trabajo, nacieron en un momento en el que declinó el crecimiento de la población y son una generación de trabajadores que tienen fuertes habilidades técnicas y que son más independientes que las generaciones anteriores", señala un documento de la American Management Association sobre cómo lidiar con las diferentes generaciones en el mundo laboral.
Y es que las generaciones que le preceden eran bastante más rígidas y respetuosas de la autoridad. Los tradicionalistas o generación del silencio (nacida aproximadamente entre 1925 y 1946) y los Baby boomers (nacidos entre 1946 y 1964), eran conocidos por ser trabajadores sumamente leales, adversos al riesgo y que anteponían al trabajo a cualquier otra área de su vida. Pero la Generación X llegó para demostrar que otra forma de enfrentar el trabajo era posible.
No es que ellos no sean dedicados, sino que tener una menor lealtad ciega hacia su trabajo es una de sus principales características, lo cual vino a romper con el orden establecido hasta entonces. Y esto se traduce también en la relación que tienen con la autoridad.
"La Generación X tiende a reaccionar con desinterés ante la autoridad, identificando muchas veces el liderazgo con una función de competencia", señala el estudio "Reescribiendo las reglas: La interacción generacional en el trabajo", realizado por ManpowerGroup.
"Es una generación que es mucho más individualista. Ellos son los primeros que deciden no apostarle su vida a una empresa ni al mundo social de subir y subir, ni al mundo familiar de casarse y tener una familia. Quien lleva al extremo esto es la generación millennial, pero los que lo inician son los X", explica Ana Estrada, directora de la consultoría Brújula Interior.
Este mismo estudio de ManpowerGroup apunta varios aspectos positivos y negativos de esta generación. En cuanto a los primeros, es que tienen experiencia, responsabilidad, están capacitados y son más estables ya que cuidan su empleo y además, enseñan a los jóvenes. En cuanto a lo negativo, es que tienen ideas fijas y les cuesta trabajo adaptarse, están a la defensiva y son conformistas y apáticos.
Son autosuficientes, no se miman y tampoco les importa lo que piensen de ellos, o incluso "si los demás piensan en absoluto", sostiene el estudio del Pew Research Center. Además, esta generación no sólo ha buscado una vida estable, sino un nivel de vida más equilibrado y mejor en todos los aspectos.
"Sus integrantes han buscado un mejor nivel educativo que el de la generación previa, colocando mayor énfasis en la calidad de vida y cuidado de la salud, promoviendo el emprendimiento y fomentando los desarrollos tecnológicos", señala un estudio de KPMG sobre el desafío de retener generaciones en el trabajo.
Estos dos últimos aspectos, los del emprendimiento y de la tecnología, sobre todo se hacen patentes en los gen X más jóvenes. Sin embargo, en general, ellos suelen haber trabajado durante varios años en empresas, por lo que son propensos a haber madurado y ser hoy emprendedores o empresarios que fundaron su propia organización después de haber estado al interior de otra mucho más grande.
Para entender a un X es también importante qué les tocó vivir en su juventud. En México, vivieron sexenios como el de José López Portillo, Miguel de la Madrid y Carlos Salinas de Gortari. En cuanto al ámbito internacional, vieron llegar a Pinochet al poder, vivieron el contexto de la Guerra Fría, cómo cayó el muro de Berlín, se desintegró la URSS y el movimiento estudiantil de 1968. A muchos de ellos les tocó que sus papás se divorciaran y que dejaran una gran parte de su cuidado a cargo de otros.
"Como crecieron más solos tienden a ser más autosuficientes. Aman la libertad para elegir. A lo mejor están en una empresa, luego deciden ser emprendedores, pero aman esta libertad. Además de que ellos buscan vidas más equilibradas y más felices", señala Ana.
Activistas, equilibrados y felices
-Dedican su tiempo libre a la cultura, el
ocio al aire libre o a la lectura, entre
otras actividades.
-Son más propensos a estar empleados.
-Tienen extensas redes sociales, de
ocupación y comunidad
-Crecieron con la filosofía de Ronald
Reagan, con la música de Michael
Jackson y sentados en los carritos de
los supermercados mientras sus padres
hacían las compras. Desde muy
chiquitos vieron la gran incongruencia en
el pensar, decir y hacer de sus padres.
-Crecieron con la televisión en sus
hogares y las reflexiones filosóficas de
los líderes de su época lo mismo que se
identificaron con las comodidades de
un mundo materialista conglomerado
con modas atrevidas .
-La Generación X no pareciera que tuvo
muchos ideales o filosofías políticas, se
centraron mucho en el uso de drogas,
modas y libertinaje.
-Las personas de la Generación X
prefieren comer pizza, comida rápida,
hamburguesas, hot dogs enfrente del
televisor y consumir cigarrillos
mientras miran un concierto o una
película del género comedia o
dramático.
-Son bastante egocéntricos y algunos
se preocupan más por su vanidad que
por los mismos hijos.
-La Generación X está acostumbrada a
que el hombre y la mujer trabajan fuera
del hogar por igual.
- La educación universitaria de la mujer
no es nada de que sorprenderse en
esta generación. Esta liberación
femenina disminuyó el número de hijos
que las familias conciben y aumentó el
número de divorcios. Los hombres
aprendieron a la fuerza a lavar los
platos de la cena, a limpiar la casa, a
cambiar los pañales de sus hijos y el rol
exclusivo de proveedor de la familia les
fue arrebatado.
-La generación X no quiere saber nada
de los valores de la generación de los
“baby boomers” . Rechazan sus
personalidades, religiones y algunas de
sus tradiciones.
-Los miembros de la Generación X se
acostumbraron al trabajo de equipo. Le
dan menos importancia a las jerarquías
y les gusta tratar y ser tratados como
iguales con sus superiores.
-Es una generación a la que le encantan
los juguetes tecnológicos y estar al día
compitiendo con las aptitudes
tecnológicas de la Generación Y.
¿Y los nacidos digitales?
Los millennials fueron considerados la sensación hace un par de años, pero luego llegó la Generación Y, otro segmento que resultó ser más digital que el grupo antecesor, y ahora es el turno de la Generación Z. De acuerdo con el estudio denominado "AdReaction 2017", realizado por Kantar MillwardBrown, la Generación Z representa al 27 por ciento de la población mundial y sus edades oscilan entre los cinco y los 19 años.
Esta generación está representada por dos mil millones de personas en todo el mundo, y según el estudio este grupo tiene distintos comportamientos, actitudes y respuestas a la publicidad.
En cuanto a la música, el análisis revela que al 43 por ciento de la Generación Z le gusta tener acceso "siempre" a la música, en comparación con el 30 por ciento de la Generación Y, siendo que además tienen mayor conocimiento digital que las generaciones anteriores.
Para el director global de Marca, Medios y Digital de Kantar Millward Brown, Duncan Southgate, "la Generación Z ha crecido en un mundo de elecciones infinitas bajo demanda, que adereza sus expectativas publicitarias".
Indicó que a ellos les atraen mucho más los spots que les permiten crear conjuntamente o dar forma a lo que ocurre, mientras que las generaciones anteriores querían más información sobre el comercial.
A pesar de su inclinación por los medios digitales, esta generación aún se impresiona por los medios tradicionales, pues 51 por ciento ve la televisión una hora o más al día, en comparación con el 74 por ciento de los millennials.
También los denominados "zetas" mantienen una actitud más positiva por los espectaculares, impresos, anuncios en el cine, la televisión y la radio, que hacia las alternativas digitales estándar.
Dentro del espacio digital, la Generación Z recibe de buena manera los videos de recompensas móviles, y los spots publicitarios que aparecen antes de un video solicitado y que se pueden saltar después de cinco segundos.
A este segmento le molesta los formatos publicitarios invasivos, como los comerciales que no se pueden saltar y los llamados pop-ups.
El contenido humorístico, la música y las celebridades en conjunto pueden hacer que esta generación sea más receptiva a la publicidad, además se sienten más atraídos a los comerciales que les permiten cocrear o ver lo que sucede cuando toman una decisión.
Por ello mantienen una actitud más positiva hacia las marcas que les permiten votar para que ocurra algo, elegir una opción, y dado su escepticismo hacia la publicidad, el contenido que hace mención de la marca es más atractivo para la Generación Z, aunque estos atributos por sí mismos no son garantía de éxito.