La policía pensó que a lo mejor se trataba de una bomba. (INTERNET)
Según la policía de la ciudad de Beaverton, en Oregon, un microondas de una tienda ‘7-Eleven’ explotó debido a que una persona intentó calentar su orina en el aparato.
Las autoridades llegaron al sitio después de que los trabajadores se dieran cuenta de que algo había explotado en el interior de este electrodoméstico.
La policía respondió al llamado y pensando que pudiera ser una bomba se envió a una unidad especial.
Al investigar, descubrieron que lo que había dentro era orina humana. Todo porque una persona que tenía que hacerse un test de drogas, pensó que su orina no estaba lo suficientemente caliente.