Protagonista. El dramaturgo José Solé fue uno de los promotores de generaciones de actores de teatro en México. (ARCHIVO)
Como un hombre que imprimió una profunda huella en el teatro universal y que a través de su carrera brindó grandes montajes de las obras clásicas griegas, del Siglo de Oro español y de los mejores autores mexicanos, es definido el director, actor y dramaturgo mexicano José Solé, quien falleció ayer en la Ciudad de México.
Autoridades y amigos dieron el último adiós al director, dramaturgo, productor y actor, quien fue director de Teatro del Instituto Nacional de Bellas Artes, nacido en la Ciudad de México el 28 de julio de 1929 y quien deja tras de sí un vasto legado con puestas escénicas de obras como La casa de Bernarda Alba, Muertos sin sepultura, Antígona.
José Solé cursó estudios de actuación, dirección, escenografía y vestuario en la Escuela de Arte Teatral de INBA; perteneció a la primera generación. En 2008 fue reconocido con el Premio Nacional de Ciencias y Artes en el área de Bellas Artes. Recibió la Medalla Bellas Artes en 2008. Desde 2008 fue Creador Emérito del Sistema Nacional de Creadores de Arte.
La Secretaría de Cultura anunció un homenaje al actor, director y dramaturgo José Solé.