Protesta. La acción se llevó a cabo delante del edificio donde el martes y miércoles se reunirán 70 representantes de gobiernos.
La organización no gubernamental Save the Children reprodujo ayer un cementerio delante de las sedes de las instituciones de la Unión Europea (UE), en Bruselas, para hacer conciencia sobre los más de 16 mil niños que han perdido la vida en los seis años de conflicto en Siria.
Sólo en 2016, el número de menores de edad muertos en el país árabe a causa de la guerra se elevó a 652, según datos de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
"El último año, más de 256 niños han muerto en ataques dentro de las escuelas. Por lo tanto, no es posible hablar en futuro si la infancia deja de ser un objetivo", afirmó el director de Cooperación Internacional de Save the Children, David del Campo.
La acción se llevó a cabo delante del edificio donde hoy martes y mañana miércoles se reunirán 70 representantes de gobiernos, de organizaciones internacionales y de la sociedad civil, en una conferencia sobre el futuro de Siria coorganizada por la UE y Naciones Unidas (ONU).
"La UE debe asumir un papel protagonista y responsable con la infancia siria, y el encuentro internacional que va a celebrarse esta semana en Bruselas es una oportunidad para demostrarlo", dijo Del Campo.
El director entregó al Servicio de Acción Exterior de la Unión Europea una petición firmada por más de 170 mil personas para que la mancomunidad "se comprometa con la infancia siria y defienda sus intereses y derechos" en las negociaciones que se siguen sobre el conflicto.