La crisis del pelotero mexicano en las Grandes Ligas es enorme y no se le ve salida al menos en el corto tiempo. Para empezar en estos momentos no existe un solo jugador que no sea pitcher en la gran carpa, el único era Adrián González pero se lastimó y ya tiene rato en la lista de lesionados, el problema es que cuando se recupere ya no tendrá su lugar en la primera base de los Dodgers, ya que el sensacional novato de 22 años Cody Bellinger prácticamente irrumpió para quedarse, 25 homerunes y 58 producidas en 71 partidos. Nuestro Titán deberá considerar su futuro en el béisbol en algún equipo de la Liga Americana como bateador designado.
Entonces sin ningún jugador de cuadro los mexicanos en las mayores son esencialmente lanzadores, donde solo Roberto Osuna taponero de los Azulejos de Toronto está teniendo una gran campaña, 2 ganados cero perdidos y 22 salvamentos, 21 en fila y una efectividad de 2.06 con 47 ponches en 35 innings lanzados. Jorge de la Rosa de los Diamantes de Arizona tiene tres ganados y uno perdido y 4.36 en limpias en su nuevo rol como preparador o pitcher de relevo. Joakim Soria de los Reales tiene 4-2 en ganados y perdidos con 3.41 en efectividad y pare usted de contar de ahí en adelante puro números negativos, sobre todo en lo que concierne en los abridores, esta temporada 2017 es una pesadilla para los abridores mexicanos, veamos: Marco Estrada de Azulejos, 4-6 y 5.17. Luis Cessa de los Yanquis, 0-3 con 4.18. Miguel Ángel González de Medias Blancas 4-8 y 5.15. Jaime García de los Bravos, 2-7 y 4.55. Yovanni Gallardo de Marineros, 3-7 y 5.65. El chavo Héctor Velazquez que es llamado por Medias Rojas cuando seles lesiona algún abridor tiene un ganado y un perdido y un alto 5.27 en carreras limpias admitidas. Julio Urías antes de la lesión que lo alejara año y medio de la actividad 0-2 con 5.40.
Como verán un panorama negro para los abridores mexicanos que de no mejorar en esta segunda mitad de la temporada se quedaran sin empleo en el mejor béisbol del mundo. Hay también un puñado de relevistas como el veterano zurdo Oliver Pérez con los Nacionales con números de 0-0 y 4.50, Oliver es el típico zurdo situacional que enfrenta a un bateador y paren de contar. Fernando Salas de los Mets 1-2 y 6.44, Giovanny Gallegos de fugaz aparición con los Yanquis 0-1 con 7.15.
En el juego de estrellas ningún nacional fue votado, Roberto Osuna fue llamado en el lugar de los ausentes ya sea por lesión o porque tiraban el domingo anterior al Clásico de media temporada. Existen varios chavos mexicanos en las diferentes organizaciones haciendo la talacha y buscando cristalizar el sueño de jugas en las Ligas Mayores, Roberto Verdugo de apenas 16 años de abuelo y padre del mismo nombre y pitchers profesionales, es un mega prospecto que juega parador en corto, los scouts hablan maravillas de él, batea de zurdo y se dice que la clase le caracteriza al fildear. Verdugo podría estar ya trabajando en el 2018 en alguna organización de las Mayores. Otro chavito con gran futuro es el cátcher de 17 años Carlos Soto junior ya firmado por los Cardenales de San Luis. Demasiado jóvenes para tenerlos en corto plazo ya en el gran circo, pero al menos ahí vienen junto con otros jovencitos talentosos. Se va a tardar la renovación de mexicanos en Grandes Ligas, por lo pronto esperar que los que están mejoren (sobre todo los abridores) ya que la situación actual es grave, el talento sobre todo asiático viene con todo y si no te pones las pilas, adiós, se acaban los puestos y llegaremos a contar con los dedos de una mano a nuestros representantes.
El motivo de orgullo de la liga mexicana de verano era la cantidad de mexicanos surgidos de sus filas en los Estados Unidos, ahora eso paulatinamente está desapareciendo, la competencia ahora es feroz y si no estás física y mentalmente apto, simplemente estas out.
Rafael Rosell
Rrosell50@hotmail.com
