LOS CAMINOS DE LA VIDA
Desde pequeño estuve en la calle, ahí me crié, sorteando a diario los peligros de estar en la vía pública, pasando por infinidad de experiencias la mayoría negativas y desagradables no sólo las inclemencias del tiempo, que serían las menos malos, sino sobre todo el maltrato físico, la discriminación y la falta de cariño. Conforme fui creciendo supe que el único delito que cometí fue haber nacido criollo, el no haber sido un individuo de linaje. Mis compañeros de crianza fueron la desesperanza, el abandono y los malos tratos, ahí en la calle donde únicamente fui guiado por la suerte, el sentido común y la desconfianza. Para bien o para mal llegué a ser adulto y la cosa no mejoró cada vez se tornó más difícil mi sobrevivencia, donde para conseguir alimento a diario tuve que recorrer muchos caminos, mendigando y humillado, casi siempre recogiendo las sobras de las personas que se ufanan de educadas, cultas y caritativas, incapaces de solidarizarse con el dolor ajeno.
Varias veces estuve a punto de morir, pero sin saber por qué seguí viviendo o más bien diría sobreviviendo, creyendo que en el futuro mi suerte pudiera mejorar. Las heridas que se sufren durante la vida, a algunos les sirven, para tener mayor cuidado para cuando se vuelva a presentar una vivencia similar, a otros les sirve para lamérselas y auto lamentarse, pero a mí solo me volvieron, desconfiado miedoso y agresivo siempre a la defensiva, listo para huir o para atacar.
Y así llegué a ser adulto, ahora sé que por desgracia no fui esterilizado y la descendencia que dejo en esta vida, puede correr igual o peor suerte que la que yo corrí, también aprendí con el paso de los años que nunca se deja de ser lo que se es, que sólo se guardan las apariencias, siempre esperé que con el tiempo las cosas cambiaran, pero ahora viejo, flaco y deslucido, me doy cuenta que nada cambia, y por qué habría de ser así en mi caso, si soy sólo lo que siempre fui, un perro de la calle.
Y ahora para terminar una gota de filosofía:
NADIE ESCAPA A SU DESTINO, TARDE O TEMPRANO ÉSTE SIEMPRE TE ALCANZA.