Columnas Social columnas editoriales SOCIALES

LA COLUMNA DEL PERRO

M.V.Z. MIGUEL DÁVILA DÁVILA

¿GORDO YO?

Me quedé sorprendido con los alcances de la globalización, es decir los usos y las costumbres, que son exportados y/o imitados por países o pueblos con maneras muy diferentes de ser entre sí. Me refiero en este caso a la alimentación en nuestro México en el cual, hace apenas unas décadas era un país desnutrido, pero hoy ha pasado a ser un país de desnutridos y con sobrepeso. Todo esto se lo debemos en gran parte a la televisión, y ahora al internet, ya que a través de estos medios, somos bombardeados por publicidad que nos incita al consumo desmedido y a la competencia implacable haciéndonos sentir que el que no imita a los países del primer mundo está fuera de la jugada.

La manera de alimentarnos que no es lo mismo que de nutrirnos ha cambiado, llevándonos a ser de los primeros países con más población con la consiguiente carga negativa que esto significa por el número de muertes y sobre todo el aumento repentino de enfermedades incapacitantes, como las enfermedades cardiovasculares, diabetes y otras relacionadas entre sí al grado de ser ya, una epidemia sin control en nuestro querido México.

Bueno, pues así como nuestros hábitos alimenticios cambiaron, también cambiaron los hábitos de alimentar a nuestras mascotas, pues les compartimos nuestra comida, no sólo en variedad sino en cantidad de veces, pues si nosotros pensamos a veces en limitarnos en no comer mucho, por el contrario pensamos que con nuestro perro o gato debe ser diferente y decimos pobrecito, es que me ve comer "y me pide".

Es increíble que más del 20 por ciento de los perros en México tienen sobrepeso, y este porcentaje se pronostica que de no hacer algo irá en aumento. Pero si ahora, los dueños de los perros no se ejercitan, mucho menos harán que sus mascotas lo hagan, o bien tenemos a un perro de mucha actividad confinado a un lugar pequeño y como toda muestra de cariño hacia él o ellos, les llenamos constantemente el plato de comida.

Muchas veces al consultorio me han traído perros para que los vitamine, desparasite, o a decir del dueño les haga algo para que engorde, aunque su peso promedio en ese momento sea el adecuado, los propietarios me dicen es que vi un perro igual al mío, pero gordito y se veía muy bonito.

Aunque se de antemano que lo que se diga en un consultorio para personas, o en un consultorio veterinario, será "como predicar en el desierto". Es nuestro deber decirles que la gordura que vemos en las personas y en las mascotas, gracias a la globalización, no significa ni belleza ni salud, que lo que come ahora un ser vivo debe ser equilibrado y de acuerdo a la región, raza y tipo de actividad de cada organismo en particular, y esto con el tiempo se reflejará en nosotros, no solo en nuestro aspecto, sino en nuestra salud, pues si bien tenemos una carga de herencia, que no podemos cambiar, si lo podemos hacer con nuestros hábitos alimenticios y también con nuestra actividad física, y de igual forma se reflejara en nuestras mascotas, quienes ya empiezan a sufrir en porcentajes altos las mismas enfermedades que nosotros. Ojalá y tomemos de inmediato de nuevo el control de nuestro entorno, pues es únicamente en nuestro beneficio y digo inmediato, pues no deberíamos de dejar como siempre las cosas para el “Lunes” que entra, pues no sabemos nunca en que momento nos puede alcanzar el destino. Y ahora para terminar una gota de filosofía: La naturaleza humana nunca está feliz, la belleza está en el ojo del observador.

Leer más de Columnas Social

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Columnas Social

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 1354025

elsiglo.mx