Montaje. Los laguneros se llevaron un susto luego de acudir al Teatro Nazas a ver La dama de negro; la puesta en escena provocó miedo y hasta risas entre los espectadores.
Si alguien la ve a los ojos un niño morirá, esa es la maldición que ha arrojado por todo el país desde hace 23 años.
La dama de negro regresó ayer a la Comarca Lagunera; como era de esperarse provocó risas nerviosas, gritos y lamentos entre los laguneros que acudieron a su encuentro en el Teatro Nazas.
Esta vez, Odiseo Bichir y Benjamín Rivero fueron los encargados de presentar el montaje dirigido por Rafael Perrín. Ellos ofrecieron dos funciones ante una buena cantidad de espectadores.
A las 6:15 de la tarde comenzó la primera. Bichir encarnó "Arthur Kipss", un vendedor de seguros. Su vida cambia por completo cuando conoce a la "Dama de negro"; desde que la vió el terror se apoderó de él por lo que decide pedir ayuda.
Desconsolado, "Arthur" encuentra un respaldo en "John Morris" (Rivero), un escéptico director de escena que le recomienda contar su terrorífico encuentro con el espectro a través de una obra, la cual le permitirá alertar a la gente de la maldición de la temible "dama".
El escenario del Nazas se volvió una singular región de Inglaterra. Ahí estaba la mansión de la famosa mujer, en donde muchas personas habían perdido la vida. "Arthur" y "John" vivieron situaciones terribles haciendo partícipes a los espectadores.
Los laguneros que acudieron al recinto cultural vivieron una experiencia de terror, pero también se divirtieron, ya que algunos diálogos de los actores ocasionaron risas.