Meta. El objetivo del diálogo en la capital kazaja es consolidar el alto el fuego en Siria.
Las facciones armadas sirias participarán en la próxima ronda de conversaciones de paz en Astaná, auspiciada por Rusia, Turquía e Irán y prevista para el miércoles, informó ayer uno de los portavoces de la oposición. "Hemos decidido acudir a esta ronda porque Rusia nos ha presentado una serie de garantías de que se cumplirán nuestros requerimientos", declaró el representante de la oposición, Yahia Aridi. La fuente explicó que Moscú garantiza que se cumplirán una serie de puntos relativos al alto el fuego, la entrega de ayuda humanitaria y la implementación de resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
La última reunión en la capital de Kazajistán, celebrada a mediados de marzo, fue boicoteada por la oposición en protesta por lo que consideraba el incumplimiento de la tregua por parte de los efectivos gubernamentales en Guta Oriental, el principal bastión insurgente de las afueras de Damasco, entre otros puntos. Para Aridi, actualmente la situación es diferente respecto a la de la pasada ronda de conversaciones, porque, además, "se está viendo que esta Administración estadounidense está siendo más seria que la de (el anterior presidente, Barack) Obama".
Astaná ha sido sede de tres encuentros en los que se discutió cómo mantener y ampliar el alto el fuego vigente en Siria desde finales de diciembre y patrocinado por Rusia e Irán -aliados del Gobierno sirio- y Turquía, valedora de los opositores. Aridi adelantó que a la cita en Astaná de los próximos 3 y 4 de mayo acudirán representantes de las principales facciones armadas sirias.
