Visita. El panteón de Oriente estuvo muy concurrido durante el jueves 2 de noviembre pleno Día de Muertos. (EL SIGLO DE TORREÓN)
Mientras un grupo tocaba y cantaba "cariño que Dios me ha dado para quererlo", a unos pasos, unos niños jugaban entre las sepulturas, algunas mujeres preparaban lo que habían llevado para desayunar, en otro lado una pareja limpiaba la tumba de su ser querido y no muy lejos de ahí una familia rezaba el Santo Rosario con fervor, pero a unas cuantas fosas un joven le ponía volumen a su bocina con música para su familiar.