Captura. Aldo Fasci, portavoz de Seguridad de Nuevo León, dijo que Cano había sido detenido en Monterrey
Tras presentar un amparo vigente, Fernando Cano Martínez, presunto operador financiero del exgobernador de Tamaulipas, Tomás Yarrington Ruvalcaba, obtuvo su libertad, luego de varias horas de su detención en San Pedro, Nuevo León.
"Fernando Alejandro Cano Martínez, detenido hoy en NL, queda libre esta noche", tuiteó la noche de ayer jueves en su cuenta oficial @comunicación NL el área de Comunicación Social del gobierno de Nuevo León.
Por la mañana de ayer jueves el empresario tamaulipeco había sido detenido por elementos de la Agencia Estatal de Investigación al salir de un restaurante del municipio de San Pedro, en Nuevo León.
El vocero de seguridad del estado de Nuevo León, Aldo Fasci Zuazua, informó en rueda de prensa que Cano Martínez se encontraba en un restaurante de la calle Corregidora. De ahí salió al detectar la presencia policial y fue detenido a varias cuadras del lugar por agentes de la Agencia Estatal de Investigación.
La captura se logró gracias a "una investigación conjunta entre el nuevo gobierno de Tamaulipas y el Estado de Nuevo León", dijo Fasci.
Según fuentes gubernamentales, por la tarde fue liberado al presentar un amparo vigente.
Cano Martínez, exvicepresidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción, es acusado de ser el principal lavador de dinero que los cárteles de las drogas entregaban a Yarrington.
El exgobernador, expulsado en diciembre pasado del oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI), es acusado de favorecer la operación del cártel del Golfo y de los Zetas para el transporte de drogas hacia Estados Unidos.
Desde 2012, la PGR cuenta con una orden de aprehensión en su contra por narcotráfico y ha solicitado a la Interpol su colaboración para capturarlo en otros países.
Según el expediente de la Corte del Distrito Sur de Texas, el empresario operó la red de corrupción en la que se lavaron activos por cerca de 20 millones de dólares, a través de 14 cuentas bancarias abiertas en México y Estados Unidos.
Además, recibió el pago de sobornos para altos funcionarios y candidatos en el nororiental estado de Tamaulipas por parte del Cártel del Golfo desde 1998 hasta el final del mandato de Yarrington, de acuerdo con la investigación de los fiscales de Texas.
Como empresario, estuvo involucrado en la construcción de numerosas obras públicas federales y estatales.
