Los Knicks son uno de los peores equipos de la NBA. Oakley ha sido un duro crítico de la situación, y ha caído de la gracia de los dirigentes. (AP)
El exastro de los Knicks de Nueva York Charles Oakley sostiene que no hizo nada malo antes de que guardias de seguridad lo rodearan y lo expulsaran del Madison Square Garden.
Sin embargo, algo ocurrió para que Oakley haya pasado de jugador popular a "persona no grata" dentro de la propia franquicia en que brilló como ala-pívot.
Oakley dijo ayer que el motivo del altercado fue su relación tensa con los Knicks y con el dueño James Dolan. Oakley fue escoltado hacia la salida y arrestado durante el partido de los Knicks contra los Clippers, que Nueva York perdió 119-115 el miércoles.
Oakley dijo durante una entrevista con ESPN Radio que se había sentado en su asiento hacía solo unos minutos, cuando lo rodeó el personal de seguridad. Negó que los guardias se le hubieran acercado después de que le gritó a Dolan.
"Estaba a cuatro filas de este tipo, así que voy a caminar en este lugar y comenzar a gritar, '¡James Dolan! ¡James Dolan!' O sea, eso es vergonzoso, hombre. No hice nada de eso", dijo Oakley. "Al principio no sabía que el tipo estaba sentado enfrente de mí, hasta que ellos avanzaron hacia allá".
Oakley dijo que está al tanto de algunas versiones, según las cuales, los empleados de seguridad tienen que rendir informes a Dolan cada vez que él esté en el Garden, y que el personal del recinto lo sigue cuando sale de su asiento hacia el baño.
Pero los Knicks afirman que Oakley estaba causando problemas el miércoles, aun antes de que los guardias de seguridad llegaran hasta su asiento.
"Hay decenas de guardias de seguridad, empleados y policías de Nueva York que fueron testigos del comportamiento abusivo de Oakley", destacó el equipo en un comunicado. "Esto comenzó cuando él entró a la instalación y siguió hasta que fue arrestado y salió. Cada declaración que hemos recibido es consistente al describir sus acciones. Todo lo que dijo desde el incidente es pura ficción".
El alero de los Clippers Blake Griffin dijo que reconoció inmediatamente a Oakley y vio que le dijo algo a Dolan antes del altercado en su asiento.
"Estaba caminando y lo vi. Él se detuvo comenzó a hablarle a Dolan", dijo Griffin. "Pero fue algo loco. No sabía de qué se trataba ni nada. Solo vi un gran tumulto".
Oakley fue acusado de tres delitos menores y enfrenta el cargo grave por invasión de propiedad ajena. Se le acusa de propinar un puñetazo en la cara a un guardia de seguridad. Cuando otras dos personas trataron de intervenir, ambas fueron empujadas y terminaron con cortes.
El exjugador debe comparecer en corte el 11 de abril.
Durante 10 años, Oakley se abrió paso a empujones en la cancha del Madison Square Garden como un combativo jugador en una era de excelencia de los Knicks, que llegaron una vez a la final.