El abridor japonés Masahiro Tanaka estuvo ocho episodios en la lomita y con respaldo de tres jonrones se apuntó el triunfo de los Yanquis de Nueva York por 6-1 sobre los Rays de Tampa Bay.
Masahiro Tanaka mantuvo un juego perfecto hasta el sexto inning y estableció un récord personal con 14 ponches, llevando ayer a los Yanquis de Nueva York al triunfo 6-1 ante los Rays de Tampa Bay. Fue la quinta victoria al hilo de los Yanquis.
Brett Gardner puso en marcha el juego con cuadrangular, Aaron Judge disparó su 33er jonrón de la campaña (máxima cantidad en las mayores) y Clint Frazier añadió un bambinazo de tres carreras en respaldo de Tanaka (8-9).
Tanaka ponchó a los primeros cinco bateadores que enfrentó. Retiró a 17 en fila hasta que el cubano Adeiny Hechavarría conectó un rodado fuerte por todo el medio con dos outs en el sexto, apenas lejos del alcance del torpedero Didi Gregorius.
JUDGE PUDO JUGAR
Aaron Judge ya puede estar tranquilo con su diente roto.
El toletero de los Yanquis de Nueva York fue titular ayer en la noche, un día después que accidentalmente perdió la mitad del diente frontal izquierdo durante un festejo del equipo en el plato.
"Estoy bien", señaló Judge. "Me lo arreglaron".
El máximo jonronero de la Liga Americana acudió a una cita con un dentista temprano en el día y le pusieron un diente temporal. Judge tiene previsto que le coloquen una pieza permanente.
En el partido del jueves contra Tampa Bay, Judge fue sacudido por el impacto en su boca del casco protector de Brett Gardner. Instantes antes, Gardner había conectado el jonrón de la victoria en la parte baja del 11mo inning y soltó su casa al aproximarse al plato.
Judge recogió el casco al temer que alguien lo pisaría y acabase lastimándose el tobillo. En cambio, acabó siendo golpeado por el casco en medio de los festejos.
"Me dieron fuerte", indicó Judge.
El jardinero se retiró del terreno sin que nadie se fijara mientras los Yanquis seguían celebrando la victoria 6-5 ante los Rays.
Pero pudo evitar que las cámaras le captaran haciendo una mueca de dolor. Además, un miembro del personal de seguridad del equipo regresó al terreno, una vez que había sido despejado, para buscar el diente roto.
