Los jugadores de Green Bay Packers permanecen con sus brazos entrelazados durante el himno nacional de Estados Unidos antes del inicio del partido disputado contra los Chicago Bears. (EFE)
La NFL considera que el mensaje que sus jugadores y equipos tratan de expresar mediante sus protestas durante la interpretación del himno nacional se ha perdido en medio de una tormenta política.
Los temas principales han sido “superados por las fuerzas políticas”, comentó ayer Joe Lockhart, portavoz de la liga, en referencia a las críticas que el presidente Donald Trump ha lanzado contra la liga, los dueños y los jugadores de los equipos por arrodillarse durante el himno.
Más de 200 jugadores se pusieron de rodillas o recurrieron a otros actos para expresar unidad el fin de semana anterior.
Lockhart comentó que dichas acciones no constituyen una protesta contra el himno o la bandera.
“Uno de los impactos que esto tiene es distorsionar los puntos de vista de la NFL y particularmente de nuestros jugadores”, indicó Lockhart en referencia a las críticas del mandatario.
Trump dijo que los dueños de la NFL les tienen miedo a sus jugadores, e insistió en que se tomen medidas contra quienes se hincan en el momento en que se canta el himno nacional.
“Si quieren saber la verdad, pienso que ellos temen a sus jugadores, y pienso que eso es una desgracia”, manifestó Trump el jueves, durante una entrevista difundida por la cadena Fox. Aseguró que “la mayoría de la gente está de acuerdo” con él.
Los jugadores se hincaron para protestar contra la injusticia social. Los planteles completos, en algunos casos incluso el dueño, entrelazaron los brazos antes o durante el himno. Tres equipos (Pittsburgh, Seattle y Tennessee) no entraron siquiera en el terreno sino hasta después del himno.
“Ellos son atacados ahora, y la lección original se ha olvidado”, indicó Lockhart. “Es importante que todos entiendan de qué hablan, que no lo vean en términos de quien está arriba o abajo en la política”.
“Los jugadores de la NFL son hombres de carácter, muchos de los cuales fungen como líderes de su comunidad. Son patriotas, apoyan a las fuerzas militares... entienden que su plataforma puede usarse para que el país sea mejor”. Lockhart insistió en que no habrá una “directriz en toda la liga” sobre protestas futuras.
“Éste es un asunto que debería involucrar a los dueños de los 32 clubes, así como a los entrenadores y jugadores a fin de que trabajen juntos”, recalcó. “Hay un diálogo muy regular entre los jugadores, entrenadores y dueños. Éste es un tema que ha acaparado los titulares. A todos nos importa mucho esto”.
“No siempre todos nuestros dueños están de acuerdo entre sí, y los jugadores suelen tener una postura que choca con la liga.
Trabajamos juntos para resolver esos temas”, añadió. “Hemos estado unidos en este tema.
Todos van en la misma dirección, pero entendemos que cada camerino es diferente”.
‘TIENEN MIEDO’
El presidente Donald Trump dice que los dueños de equipos de la NFL “le tienen miedo a sus jugadores” y reiteró que deben penalizar a quienes se hinquen de rodillas para protestar la injusticia racial.
Trump dijo que comenzó a criticar a los jugadores porque tiene “tantos amigos que son dueños”, y añadió que “pienso que ellos temen a sus jugadores, si quieres que te diga la verdad, y pienso que es una desgracia”.
Trump habló en una entrevista transmitida el jueves por el programa “Fox and Friends”. Dice que “la mayoría de la gente está de acuerdo” con él. Joe Lockhart, portavoz de la NFL, tildó de “imprecisos” los comentarios del presidente.
“Me parece que ha aparecido cierta declaración de que los dueños de nuestros equipos le tienen miedo a nuestros jugadores y de que le hemos pedido a líderes políticos que intervengan para ayudarnos, pero esos comentarios son imprecisos”, dijo Lockhart.
Trump ha pasado días atacando a los jugadores que se hincan de rodillas durante el himno nacional e insiste en que la liga debería requerir a los jugadores que se paren. En respuesta a Trump, el número de jugadores que han realizado protestas, de rodillas, con brazos entrelazados o quedándose en los vestidores durante el himno, ha aumentado.