Urgencia. El presidente Donald Trump asegura que la situación en Siria se necesita replantear.
Los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU continuaban negociando una resolución para condenar el supuesto ataque químico perpetrado en el norte de Siria, a pesar de que Rusia rechazó de entrada la propuesta de las potencias occidentales.
"Hemos entrado en una verdadera negociación", dijo a los periodistas el embajador francés, François Delattre, mostrándose esperanzado sobre la posibilidad de llegar a un acuerdo sobre un texto y que éste sea votado "cuanto antes".
Según fuentes diplomáticas, está prácticamente descartado que eso pueda ocurrir hoy, pero las potencias occidentales sí creen que podría haber una votación hoy jueves.
El embajador británico, Matthew Rycroft, confirmó que no esperaba que las negociaciones concluyeran ayer, pero insistió en la idea de que el texto presentado por EU, Francia y su país debería ser perfectamente aceptable para cualquier Estado miembro.
"Creo que es absolutamente crucial que el Consejo de Seguridad se una para condenar este horrendo ataque en Idleb, para asegurar que hay una investigación adecuada y para garantizar que hay total rendición de cuentas para quien esté involucrado", dijo Rycroft a los periodistas.
El borrador planteado originalmente por las potencias occidentales no señalaba a nadie como responsable del ataque, a pesar de que Washington, París y Londres han apuntado directamente al régimen de Bachar al Assad.
TEXTO INACEPTABLE
Rusia, mientras, calificó el texto de "inaceptable" e insistió en que el Consejo de Seguridad no debería pronunciarse hasta que no haya una investigación "completa" de lo sucedido en la localidad de Jan Shijún.
Pese a que fueron muy claros en su oposición a la iniciativa, los representantes de Moscú han aceptado discutir con el resto de miembros del Consejo de Seguridad.
Rusia ha vetado en los últimos años varias resoluciones sobre Siria, incluida una el pasado enero que buscaba precisamente imponer sanciones a Damasco por el uso de armas químicas.
Estados Unidos, el Reino Unido y Francia insistieron hoy a los rusos en que deben dejar de proteger al régimen de Al Assad en Naciones Unidas.
Mueren 22 miembros de una familia
El apesadumbrado padre acunó en sus brazos a sus gemelos de 9 meses de edad, Aya y Ahmed. Conteniendo las lágrimas acarició su cabello mientras musitaba: "Di adiós, bebé, di adiós", a sus cuerpos sin vida.
Después, Abdel Hameed Alyousef los llevó al cementerio donde estaban siendo sepultados 22 miembros de su familia. Cada rama del clan tuvo su propia fosa. Más de 80 personas, incluidos 30 niños y 20 mujeres, murieron en el ataque con armas químicas registrado el martes en el poblado sirio de Khan Sheikhoun, y la cifra podría aumentar. La familia de Alyousef, uno de los principales clanes del poblado, fue la más afectada. Otro miembro de la familia, Aya Fadl, recordó que salió corriendo de su casa con su hijo de 20 meses de edad en sus brazos y que pensó que podía protegerse en la calle del gas tóxico. En lugar de ello, la maestra de inglés de 25 años enfrentó en primera persona el horror del ataque: una camioneta pick-up cargada con cadáveres, incluidos muchos de sus familiares y alumnos. "Ammar, Aya, Mohammed, Ahmad, los amo mis pajaritos; realmente ellos eran como pajaritos. Tía Sana, tío Yasser, Abdul-Kareem, por favor, escúchenme", decía Fadl, ahogando el llanto mientras recordaba cómo se despidió de sus familiares que estaban amontonados junto a otros cuerpos sin vida.
Más muertes
El número de muertos por el supuesto bombardeo químico ocurrido ayer en la localidad de Jan Shijún, en el norte de Siria, ha aumentado a 86 personas, entre ellas 30 menores, señaló ayer el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Entre los fallecidos hay también 20 mujeres, precisó el Observatorio, que no descartó que el número de víctimas mortales aumente porque todavía hay heridos graves y desaparecidos entre los escombros. La Defensa Civil Siria, que presta servicios de rescate en áreas fuera del control de las fuerzas gubernamentales, ha informado de 50 muertos y 300 heridos en el ataque.
Según el Observatorio, aviones de guerra no identificados lanzaron proyectiles que contenían gases contra distintas zonas de Jan Shijún, ubicada en el sur de la provincia septentrional de Idleb.
Los heridos presentaban síntomas de asfixia, vómitos y espasmos y algunos echaban espuma por la boca, denunciaron esas fuentes.
Matan EI a 33
El grupo terrorista Estado Islámico (EI) asesinó a 33 personas en la provincia siria de Deir al Zur (noreste), en la mayor ejecución masiva llevada a cabo este año por los yihadistas en ese país, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. La matanza se produjo en la localidad de Badiat al Mayadín, situada a unos 8 kilómetros al sureste de la ciudad de Al Mayadín, en el este de la provincia de Deir al Zur, considerada como uno de los principales bastiones del grupo terrorista. Las víctimas tenían entre 18 y 25 años, según activistas citados por el Observatorio, que no presenciaron la ejecución, pero vieron los cadáveres, todos ellos degollados. Los activistas desconocían la identidad de los fallecidos y no sabían si eran prisioneros civiles o si pertenecían a alguna facción armada.
La ejecución masiva fue realizada al lado de una fosa cavada en la tierra, que estaba llena de sangre por las ejecuciones cuando la encontraron los activistas, según la ONG.
'El mundo sobre Trump'
El peso de los problemas de los problemas del mundo podría empezar a caer sobre los hombros de Donald Trump.
De pie en el soleado Jardín de las Rosas de la Casa Blanca, el presidente dijo ayer miércoles que el grotesco ataque con armas químicas en Siria ha cambiado su manera de ver un conflicto que previamente había dicho quería mantenerse alejado. Lamentó las muertes de las víctimas más jóvenes -"niños inocentes, bebés inocentes"- y dijo
"Ahora es mi responsabilidad", declaró.
Las palabras del mandatario están lejos de ser una declaración de que pretende tomar acción, y evitó de manera notable discutir sobre opciones de represalias que estaría dispuesto a considerar. Al final, su retórica bien podría caer dentro de la letanía de fuertes críticas al presidente sirio Bashar Assad, que realizaron Barack Obama y otros líderes mundiales.