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NORMATIVIDAD AGROPECUARIA

LA CARNE DE PESCADO

DR. AGUSTÍN CABRAL MARTELL

El pescado es un alimento que, en ocasiones, se olvida incluir en la alimentación diaria sin recordar que es muy completo tanto en su parte nutricional como por sus propiedades curativas. Aporta gran cantidad de proteínas de elevada calidad biológica, superior a la de la carne roja e incluso puede ser mejor digerida que ésta no sólo por sus grasas (polinsaturadas), sino también por tener una menor cantidad de tejido fibroso lo que facilita su fragmentación y digestión. Así que, se recomienda su consumo especialmente a los ancianos y niños. Además, contiene pocos hidratos de carbono (menos del 2%), pero, en cambio, tienen una gran cantidad de minerales (fósforo, calcio, yodo, flúor y hierro) y vitaminas (A, D, E y del grupo B), éstas, junto con el hierro, se encuentran en mayor proporción cuanto más graso es el pescado. Sin embargo la grasa del pescado es cardiosaludable al contrario de las carnes rojas.

Es beneficio comer pescado de forma regula: Mejor tiempo de coagulación. El pescado beneficia al corazón, haciendo que la sangre no tienda a sufrir procesos de coagulación anormales que pueden producir el ataque al corazón. El efecto se atribuye a las grasas omega-3 presentes en el pescado. Mejora la presión arterial con sus grandes aportes de potasio y escaso sodio, el pescado fresco ayuda a mejorar la presión arterial. Reduce el colesterol malo o LDL en la sangre. Una dieta rica en aceite de salmón reduce en 20% el colesterol malo o LDL y el nivel de triglicéridos se disminuye entre un 40 y un 67 %.

Debido al contenido graso de cada pescado se pueden clasificar en blanco (menos de un dos por ciento de grasa) y azul o graso (más de un cinco por ciento de grasa).

Para identificar la frescura del pescado, se debe observar: olor suave a mar, (evitar si éste es muy penetrante); ojos transparentes, elevados y brillantes, nunca opacos; piel brillante, elástica y de color encendido, con las escamas adheridas; branquias o agallas de color rojo intenso, húmedas y brillantes; consistencia rígida, carne muy firme y adherida a la espina.

Para saber si un filete es fresco, sólo se debe apretar con el dedo: si la carne es firme y elástica, es fresco. Si queda una huella, no lo compre. Cuando adquiera filetes de atún o pez espada, sólo acepte los que tienen pocas manchas oscuras. Si se trata de pescado en lata, se busca en la etiqueta el contenido de sodio y grasa. Cada día crece la oferta de pescado en conserva al natural y con poca sal.

Una manera de identificar un pescado azul de uno blanco es mediante su aleta caudal, que en el pescado azul es en forma de flecha o "V", a diferencia del blanco que suele ser redondeada, además es más musculoso y de tonalidad más oscura.

Para guardar el pescado fresco, es necesario envolverlo en papel parafinado y colocarlo en la parte más fría del refrigerador. Aguantará hasta dos días. Sólo unos pocos pescados, como la caballa y el arenque, hay que comerlos en el día. Si el pescado es muy fresco, puede escaldarlo durante unos instantes antes de guardarlo y se aguantará unos 4 días.

Si requiere guardar el pescado por más tiempo, envolver en papel de aluminio o en bolsas especiales y congelar. La mayor parte de los pescados se pueden conservar entre tres y seis meses.

Cuando prepare pescados como los arenques o el salmón, se debe quitar las espinas con unas pinzas. Si se trata de un sábalo entero, puede pedirle al pescadero que lo prepare en filetes y quite las espinas. .

Algunas precauciones: Es importante que el pescado se encuentre fresco para su consumo, ya que al entrar en descomposición, puede liberar histamina, lo que ocasiona una reacción de tipo alérgico acompañada de prurito intenso, erupción cutánea y problemas respiratorios, a veces de gravedad.

Así mismo, consumir pescado crudo puede provocar a que ciertos tipos de parásitos entren en el organismo. Por esa razón, es necesario cocinarlos de forma adecuada.

El pescado azul (especialmente la anchoa, la sardina y el arenque) tiene un alto contenido en purinas (ácido úrico). Por ello, las personas con gota deben evitar su consumo.

Haga el propósito, señora ama de casa de incluir en las comidas el pescado con mayor frecuencia, ya que aporta grandes beneficios a la salud.

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