Fichado. Medina lamentó que se haya filtrado una foto con su ficha penitenciaria en redes sociales.
Rodrigo Medina de la Cruz, exgobernador de Nuevo León, dejó la noche del jueves el penal de Topo Chico, donde permaneció alrededor de 18 horas.
Al salir del centro penitenciario ubicado al noroeste de la ciudad, resaltó el profesionalismo del personal penitenciario y de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, pues hubo respeto a su integridad física y garantías en un área de primeros reclusos donde permaneció.
No obstante, lamentó que se haya filtrado una foto con su ficha penitenciaria en redes sociales y medios de comunicación, la cual fue destruida con el resolutivo del juez federal pero, consideró, dañó su imagen pública.
"No hemos sido juzgados, declarados culpables por ningún delito", recordó y sostuvo que seguirá haciendo frente a las acusaciones incluso cuando, según él, se actuó de forma indebida en su contra.
Previamente Alonso Aguilar Zínser, defensa del exmandatario estatal, sostuvo que la detención de su cliente fue sin justificación, al violarse una suspensión de amparo, por lo que hicieron la denuncia ante una Juez de Distrito.
La liberación, indicó, no implicó el pago de fianza; aunque "el auto de vinculación sí existe, lo que se anuló fueron las medidas cautelares".
Agregó que analizarán una eventual demanda contra el Juez de Control que dictó la medida cautelar, ante el daño al honor y prestigio de su cliente.
INCUMPLIMIENTO EN SUSPENSIóN El Juez Quinto de Distrito en Materia Penal en Nuevo León consideró que el juez de control incumplió la suspensión concedida al exmandatario al ordenar su prisión preventiva y recluirlo en el penal de Topo Chico, la madrugada de ayer tras concluir su audiencia -que duró más de 18 horas- sobre el delito de peculado y daño patrimonial.
De no liberar inmediatamente al exgobernador, el juez de control, Miguel Ángel Eufracio Rodríguez, podía ser sancionado con una multa de 100 a mil veces el valor diario de la Unidad de Medida y Actualización (UMA), equivalente a una cifra entre 7 mil 549 y 75 mil 490 pesos.
El juez decretó la prisión preventiva al considerar que había riesgo de que el exgobernador pudiera sustraerse a la acción de la justicia, ya que vive en la Ciudad de México y porque sólo posee un rancho de 3.2 millones de peso a su nombre, insuficiente para cubrir un daño al erario por tres mil 128 millones de pesos, en estímulos indebido a la empresa Kia.
Ayer jueves, el juez de control rindió su informe previo al juez de amparo, en el cual indicó que Medina de la Cruz fue detenido e internado en el penal.
No obstante, el juez de amparo consideró que la posibilidad de que el exmandatario evada la justicia es menor debido a que ha comparecido ante la Subprocuraduría Anticorrupción de la entidad a escuchar los diversos cargos que se le imputan.
La fiscalía estatal reclama al exmandatario 3 mil 567 millones de pesos por presunto quebranto al patrimonio del estado, pero al no ser un ilícito considerado grave no merece prisión preventiva.
Decisión
El juez había dictado prisión preventiva, pues consideró que:
⇒ El exgobernador pudiera sustraerse de la justicia.
⇒ Pues sólo posee un rancho de 3.2 mdp, insuficiente para cubrir un daño al erario por 3 mil 128 mdp.