La inesperada muerte de un bebé de un año de edad, quien fue objeto de una operación ambulatoria, provocó la denuncia de una clínica privada ubicada al norte de Mérida y en contra de dos médicos que atendieron al niño.
Los padres afectados, Santiago y Mónica, usaron las redes sociales para denunciar los hechos y señalaron que al menor se le practicó una cirugía ambulatoria, pero tras esa intervención comenzó a tener complicaciones que derivaron en su fallecimiento el pasado 19 de agosto. Afirman que el niño presentó dolores estomacales, diarrea, así como fluidos pestilentes y de color verdoso, sin que en la citada clínica les explicaran las razones. Indicaron que las autoridades de ese hospital privado se han negado a darles el expediente del menor, para conocer las causas que ocasionaron su fallecimiento.