CUÁNTO VALE UN VETERINARIO
La imagen del veterinario es siempre la misma, la gente siempre dice casi lo mismo cuando a uno le pregunta de que trabaja. Y uno dice: soy VETERINARIO con un suspiro casi imperceptible. Alguien dirá "Ay que bonito", acto seguido también responderá: "Yo también quise estudiar veterinaria pero.. después.. Ahí vienen una serie de excusas, como que sufría mucho por los animalitos, era mal estudiante, etc. La gente en general tiene una costumbre de asociar la imagen del veterinario con alguna persona buena, incapaz de enojarse, que trabaja las 24 horas en función de la salud de cientos de animalitos que sufren por la vida, ad honorem, que no duerme y que ni siquiera tiene derecho de ir al baño cuando de una urgencia se trata, y además, saber de todo. "Dígame doctor, usted que es veterinario, este insecto que le picó a mi hijo, ¿Qué es?". Cualquier pregunta relacionada al reino animal un veterinario debe de estar en condiciones de contestarla y si no le responde "Mira, la verdad no sé". Acto seguido la contestación será.. "Y para que eres veterinario?". La imagen del veterinario estará siempre rodeada de un halo de hermana de la caridad, de una persona que al mismo tiempo que recibe el título, catalogan al veterinario a la que todo se le regala, luz, agua, hipoteca, el colegio de los hijos, el alquiler de la clínica, .. y todo ello para que les cobre una infame cantidad de dinero a los propietarios de mascotas, o mejor aún para que no les cobre.
Más de una vez trabajando, me ha pasado de gente que venga con su mascota y pasan a consulta para revisarle con distintos grados de patologías y después de que uno haga la consulta larga o corta de acuerdo a lo que necesitaba, acto seguido la gente pregunte; ¿le debo algo por esto…? "Porque no traje dinero" o "Solo traje para la peluquería" o "Creí que por esto no me iba a cobrar". Jamás a mí se me ocurriría pasar por una panadería, comprar una barra de pan y preguntar al panadero.¿ Le debo algo por esto?. Si es barata, ¡Por qué no me lo regala..?
Por contrapartida cuando un veterinario se pone firme y quiere cobrar sus honorarios, muchos comentarios de sus clientes son. "Usted es un carero o "Solo le interesa el dinero", porque Fulanito por hacer lo mismo me cobra menos, le da un premio a Boby y le rasca la espalda.. Además me da un boleto para un sorteo de una cesta navideña.
¿Cuánto vale su veterinario Señor o Señora? Nada, poco, mucho. Nosotros consideramos que un buen cliente es aquél que se preocupa por la salud de su mascota, es fiel, cumple, se interesa en buscar el mejor profesional y además, paga. Usted ¿Cómo se evalúa como cliente?? Malo, regular, bueno, muy bueno, excelente…
Situación: Hola, quiero una bolsita de premios. Ah y ya que estamos aquí ¿Dígame doctor porque mi perro está todo pelado de los dos lados y toma mucha agua? (Clientes que piensan que la consulta no cuesta en la compra de un artículo).
A veces con cierto grado de paciencia que uno suele tener dependiendo de muchas variables, trata de hacerle entender que una patología de ese tipo requiere de una consulta, incluso de la realización de análisis, y que lamentablemente va a tener que gastarse cierta cantidad de dinero. Desafortunadamente la asignatura de adivinar o de leer la bola de cristal, todavía no la enseñan en la Facultad de Veterinaria. Acto seguido mucha gente dice "ahh ¿en serio?, entonces vuelvo en otro momento". Por lo bajo muchos piensan, "A éste solo le interesa cobrarme o éste no sabe nada. Y siguen diciendo: "Sí esto, según lo que me dijo mi vecina del tres, son hongos que se curan con un poco de pulguicida". Esa misma persona a veces también intoxica a su mascota con algún preparado extraño a las dos de la mañana y pretende que el veterinario salte de la cama y le solucione todo, y al final le diga: "Mañana le pago porque no tengo efectivo, en la urgencia me olvidé del dinero"
EL VETERINARIO puede ser muchas cosas pero no es estúpido, una cosa es ser bueno y otra cosa es "……." Los veterinarios también tenemos buenos clientes, con los que se genera un vínculo de confianza y cariño. Un buen cliente no es de un día o de una compra, este se demuestra con el tiempo. Un buen cliente se preocupa por saber quién es su veterinario, si está capacitado, si trabaja bien, si trata bien a su animal, si cumple con su trabajo, si es responsable, si hace cursos de formación, si se actualiza, e incluso si es buena persona. Valora los esfuerzos tanto comerciales como académicos y criticará donde uno puede mejorar.
¿Cuánto vale para usted un buen veterinario? La respuesta es sencilla: Lo que vale para usted su mascota. Si su mascota tiene un lugar importante en su vida el valor de su veterinario crece, y usted pretende que también él esté a la altura de su sacrificio económico. Las exigencias en esta relación deben de ser cruzadas, un buen cliente exige y un buen veterinario también.
Un veterinario que no se actualiza, que no trata de mejorar su condición de trabajo o que no es ambicioso en su trabajo tampoco puede pretender clientes de lujo, porque el cliente de lujo también elige e investiga. El veterinario anacrónico tendrá en su mayoría clientes mediocres, y eso también es culpa de uno mismo.
Un veterinario es una persona que estudió en una Universidad un mínimo de 5 años para obtener una licenciatura, muchos de ellos tendrán postgrados, maestrías, bastantes congresos y cursos de capacitación, en los que hay que invertir tiempo, esfuerzo y dinero, tendrá muchas horas de dedicación diaria, una enorme cantidad de guardias, se habrá quitado bastantes horas de sueño y abundantes horas de estar con su familia o con sus amigos, para dar un servicio de calidad a su mascota, mucho dinero invertido y un mayor sacrificio.
A la hora de consultar un veterinario, mírelo más como un profesional de lujo que usted tiene la suerte de consultar y confiarle la salud de su animal. El especialista al que muchas veces la gente no quiere valorar, o valora conforme quiere a mascota y le seguirán preguntando después de una consulta. ¿Le debo algo por su trabajo? Dr. Alejandro Paludi.