"ESTA MULA ES MI MACHO" CONTRA "SI TE DIGO QUE LA BURRA ES PARDA ES PORQUE TRAIGO LOS PELOS EN LA MANO". LA TIRANÍA DEL RELATIVISMO CONTRA EL PENSAMIENTO CIENTÍFICO
El relativismo es una tendencia que, cada vez más, se extiende en el pensamiento contemporáneo. Disfrazada por una falsa autonomía, significa una renuncia a la evidencia, a la investigación, a la curiosidad y al pensamiento científico.
Siendo una de las características del individualismo liberal, aparenta respeto de pensamiento y de conciencia: "cada quien su rollo", "es lo que yo pienso", "ésta es mi verdad", "ésta es mi realidad. Pero se engaña.
El relativismo revive una vieja teoría filosófica llamada "subjetivismo" que es la tendencia a que sea la experiencia personal lo que domine y oriente al sujeto: "todo depende del punto de vista de cada quien y cada cual ha de obrar según su propia convicción". El problema es que al negar verdades y principios absolutos, ya no hay nada que marque una pauta en el ser y en el obrar de la sociedad. Anarquía en la que cada persona tiene su verdad y su moral, se actúa conforme a "mis" convicciones, a "mis" verdades y a "mis" posturas. Perdiendo justificación y sentido la realidad. Cada uno tiene su propia historia individual, su propia realidad individual y su propia verdad individual. Cada individuo se mueve en un espacio sin horizonte en donde no hay futuro. Creyendo que únicamente existe el presente, no se tiene ninguna deuda con el pasado y ningún compromiso con el futuro. Los progresos y conocimientos del pasado pierden validez.
El método científico en cambio trata de aceptar hechos; probando ideas o hipótesis a través de la observación y verificación o por medio de información derivada de experimentos pasados, para saber cómo es el mundo o cómo funciona. Este método ha sido el mejor camino para determinar hechos desde mas de 1000 años antes de Cristo. Negando las verdades descubiertas por la razón es una verdadera involución de la humanidad.
Un ejemplo de relativismo es el presidente norteamericano, que niega la realidad del calentamiento global, no obstante comprobaciones científicas. Su salida del acuerdo de París, en el que los países del mundo se comprometían a realizar acciones para reducir las emisiones de CO2, es más bien basada en un capricho que no considera los daños al planeta y a su propio país.
Pero no es el único ni el primero en seguir este modo de pensar (de hecho Obama no hizo gran cosa tampoco, ni lo están haciendo otros países industrializados). Al continuar la mayoría de los países, bajo el mismo sistema socio-económico basado en el consumismo, la producción y la explotación de recursos, son también responsables de la degradación del planeta, con la consecuente catástrofe ecológica, pobreza y desigualdad. Estos también son datos innegables y comprobados científicamente, que exigen una transformación que no se está dispuesto a hacer. Aferrados a nuestra idea capitalista estamos caminando a un ecocidio y no lo queremos reconocer.
México se encamina a una coyuntura a la que debe ser consiente; ante la necesidad urgente de un cambio mundial de sistema socioeconómico que tiene al mundo al borde de la catástrofe ecológica, de una confrontación bélica, de una gran hambruna o de todo al mismo tiempo, se presenta como el país con características para liderar esa transformación, no sólo por su lugar geográficamente estratégico al lado del país representativo del sistema caduco neoliberal, sino también por su riqueza cultural, conservada por una población que encierra aún valores contrarios al sistema mundial imperante.
Cuenta además con los pueblos originarios (10% de la población) que ya se están organizando, que están cansados de corrupción y de explotación, que cuentan con una espiritualidad y un conocimiento ancestral en armonía con la naturaleza, que los ha hecho sabios, en contraposición con un sistema irracional que ha hallado la manera de llevar el mundo moderno a la destrucción en pocos años. La elección de María de Jesús Patricio Martínez, indígena de Jalisco por parte del CNI (Consejo Nacional Indigenista) para contender como candidata independiente en las elecciones presidenciales del 2018, puede ser el inicio de todo un movimiento con repercusiones no solo nacionales sino mundiales. Elegida por muchos delegados de comunidades, pueblos y barrios de todo el país, los representa a todos. La Iglesia se ha declarado también promotora de un sistema más humano y solidario. Contarán también con apoyo significativo de quienes han descubierto la incoherencia capitalista, tanto a nivel nacional como internacional.
Las elecciones de este domingo en el 20% de la población nacional, vistas desde esta amplitud de horizonte, toman importancia estratégica porque puede ser el detonante de una reacción en cadena, de participación ciudadana.
El discernimiento que es consecuencia una conciencia bien formada e informada, deberá ser el fundamento de decisiones sabias, basadas en hechos y en verdades científicas, que son aceptadas desde la humildad de una conciencia que se abre a la verdad, que no se encierra en un relativismo desinteresado del otro y del bien común, que no es el capricho individual y egoísta de quien no quiere buscar la verdad, sino la búsqueda sincera y abierta al conocimiento y a la verdad, dispuesta a aceptarla sin imponerse tiránicamente: "esta mula es mi macho".
Que las elecciones de este domingo estén basadas en información veraz, fruto del discernimiento de una conciencia bien formada.
