Cargo. El secretario de Estado Rex Tillerson podría ser reemplazado en los próximos días.
La Casa Blanca planea destituir al secretario de Estado, Rex Tillerson, y que sea reemplazado por el actual director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), Mike Pompeo, según publicaron ayer diferentes medios locales.
El periódico The New York Times, que cita a altos funcionarios del Gobierno, asegura que Pompeo sería sustituido en la CIA por el senador republicano Tom Cotton, una figura próxima al presidente estadounidense, Donald Trump.
Según el Times, el primero en adelantar los planes de la Casa Blanca, no está claro si el plan cuenta ya con la aprobación final de Trump, que según numerosas informaciones mantiene una tensa relación con Tillerson.
El futuro del secretario de Estado dentro de la Administración lleva meses en el aire, en medio de continuos rumores sobre su posible salida a causa de sus diferencias con Trump.
El pasado octubre, Tillerson se vio obligado a negar públicamente que estuviese pensando en dimitir ante la insistencia de esas informaciones.
"Nunca he considerado abandonar este puesto", dijo entonces Tillerson en una comparecencia sorpresa ante los medios, poco después de que la cadena de televisión NBC indicara que este verano pensó en dimitir debido a sus crecientes tensiones con la Casa Blanca e incluso llamó "idiota" a Trump durante una reunión privada.
El que fuera máximo responsable de la petrolera Exxon y Trump han chocado reiteradamente en varios asuntos clave de la política exterior estadounidense, desde el acuerdo nuclear con Irán a la crisis con Corea del Norte, según numerosas informaciones.
Según The New York Times, el favorito para ponerse al frente de la diplomacia estadounidense es ahora Pompeo.
FALSAS INFORMACIONES
El jefe de gabinete de la Casa Blanca, el general John Kelly, le aseguró ayer al secretario de Estado, Rex Tillerson, que son falsas las informaciones de prensa sobre que el presidente estadounidense, Donald Trump, prevé despedirle en semanas o meses.
Así lo explicó ayer la portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, en su rueda de prensa diaria, tras ser preguntada por esa información.
Nauert defendió que a Tillerson "le gusta su trabajo", tiene "mucho trabajo por hacer", mantiene "su agenda completa" y hoy tuvo dos reuniones con Trump con total normalidad.
No obstante, recordó que "el secretario sirve a voluntad del presidente" y subrayó que continuará desempeñando su trabajo "hasta que el presidente desee".