Proponen voltear hacia otros socios

"Se deben mandar señales de intercambio con otros países"

Una de las señales que debe mandar México hacia el mundo es que el país tiene otros socios comerciales con los que puede tener un intercambio comercial, considera el subjefe del equipo negociador del Gobierno federal durante las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), Jaime Zabludovsky.

En momentos en que la administración estadounidense emite declaraciones que causan incertidumbre entre los empresarios e inversionistas, el exfuncionario asevera que independientemente de lo que haga, quiera o diga el primer mandatario de Estados Unidos, Donald Trump, en la economía mexicana se debe de continuar con una propia agenda interna y una de integración.

Por ejemplo, trabajar en mejorar el Estado de derecho, buscar la diversificación de mercados e implementar las reformas estructurales.

Además de que "hay que prepararse (para la modernización o renegoción) porque contamos con una experiencia de 26 años de negociaciones y de 12 tratados de libre comercio".

Pero hay que considerar que estamos en momentos diferentes a los que se vivió durante las negociaciones del TLCAN, porque si bien en los 90 Canadá, Estados Unidos y México querían un acuerdo, actualmente "no sabemos bien a bien qué quiere Estados Unidos, nuestra contraparte más importante. Pero el proceso, la maquinaria, las consultas y la disciplina es la misma".

Para Zabludovsky Kuper, quien ahora es vicepresidente ejecutivo de la firma de consultoría en comercio exterior Iqom, hay que ser pacientes porque la modernización o renegociación del TLCAN así lo requiere.

Comenta que en el proceso de diálogo que se entable entre los integrantes del tratado comercial hay que escuchar las propuestas que se presenten y evaluar si son del interés del país y de los mexicanos.

Lo más importante, dice, es lograr acuerdos que manden una señal de certidumbre a los mercados porque el no tenerlo genera volatilidad y depreciación en la moneda mexicana.

→ ¿Qué es lo que no debemos descuidar en la negociación?

Escuchar y evaluar si lo que va a pedir EU, es del interés nacional o no, eso es lo que nos debe preocupar.

→ ¿Lo que no debemos admitir como país en ningún momento?

Es difícil porque hay que ver lo que piden. Pero hay que proteger el acceso de México y la certidumbre que le ha dado a los negocios en los últimos 22 años al país. Lo que no podemos aceptar es un posible rompimiento de la certidumbre de hacer negocios en la economía mexicana.

→ ¿México debe aceptar un incremento de aranceles?

No debe ser aceptable, no sé si sería mejor decir que no hay Tratado de Libre Comercio, pero no debe aceptarse un alza de aranceles.

→ ¿La incertidumbre cuánto durará?

Cuando se sienten en la mesa los tres países las cosas se van a tranquilizar. Por ahora estamos a merced de la respuesta de los mercados a los tuits del señor Trump. Y esperamos que el gobierno del empresario sea responsable. El tipo de cambio se depreció y el daño está hecho, ahora esperamos que sea temporal esa volatilidad.

México no está "manco" y puede defenderse de cualquier práctica desleal en que incurra el gobierno de Estados Unidos (EU), advierte Luis Fernando de la Calle Pardo, quien fue el ministro de asuntos comerciales en la embajada de México en Washington durante las negociaciones del TLCAN.

Explica que hay objetivos generales que deben tenerse claros ante una posible renegociación. Como mantener a la economía mexicana abierta y no proteccionista; evitar que Estados Unidos acuerde un alza de aranceles porque sería "contraproducente", y buscar una negociación favorable o mejor quedarse sin tratado.

Aunque dice que con la administración de Trump en el corto plazo pesará más lo político, admite que en el mediano y largo plazos los temas económicos prevalecerán por lo demás.

"Se debe de tener siempre como objetivo de largo plazo el crecimiento y desarrollo de México, el cual se ve apuntalado por la apertura comercial", menciona.

Para el ahora director de la consultoría De la Calle, Madrazo y Mancera, los principios sobre los que debiera de llevarse a cabo una eventual renegociación deben ser: tener un objetivo claro, unidad, y estar conscientes que la toma de decisiones es descentralizada, por lo tanto juegan un papel importante, alcaldes, gobernadores, diputados, senadores, centros de investigación y hasta hay que convencer a los medios sobre la importancia del TLCAN, como se hizo en 1992.

→ ¿Qué errores debemos evitar?

Lo que se debe de hacer es no tener mucha prisa. No sacrificar la sustancia por el tiempo. Si lo hacemos rápido está bien, siempre y cuando el acuerdo esté bien, pero si requiere más tiempo es mejor esperarse.

→ ¿Sería preferible quedarnos sin TLCAN a una mala negociación?

Sí, dependiendo de lo que pongas sobre la mesa, pero es posible que en algún momento sea mejor salirse, que quedarse con algo mal negociado.

→ ¿Cuál es la premisa con la que se debe negociar?

México debe mantenerse como una economía abierta, independientemente de lo que quiera hacer Estados Unidos. En una negociación deben de consultarse a muchas personas, hay que tener cercanía con el Senado y tener una estrategia bien diseñada por el Ejecutivo

El sector privado debe de tener objetivos generales y la Iniciativa Privada debe dejar claro que el punto de partida o la premisa es mantenernos como economía abierta.

La integración económica México y Estados Unidos debe seguir y profundizarse por las razones estructurales que se tienen. Pero si el fenómeno Trump nos distrae en el corto plazo, en el mediano plazo vamos a seguir con la integración.

→ Ante el discurso de Trump, ¿qué es lo que no debe aceptar México, tener nuevamente aranceles?

Nunca nos pueden pedir ellos [EU] hacer algo contrario para México. [Por eso imponer aranceles], sería contraproducente. Si nos ponemos aranceles entre nosotros vamos a favorecer a importaciones de terceros países. Por eso la posición de México debe ser clara de que no estamos dispuestos a tener aranceles.

 Piden no salirse del acuerdo

El sector privado del país aseguró ayer que México no debe salir del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), pero debe enfrentar con dignidad, firmeza y sensatez las nuevas circunstancias comerciales con su principal socio, Estados Unidos.

En conferencia de prensa, dirigentes y representantes de al menos 20 organizaciones empresariales, industriales comerciales y financieras, encabezadas por el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), se declararon listos para la renegociación con el gobierno de Donald Trump y ver ésta como una oportunidad para mejorar la relación bilateral.

Refrendaron su llamado a la unidad nacional y a trabajar junto con el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto para proyectar hacia el exterior las fortalezas de México, profundizar los cambios internos que potencialicen el desarrollo económico y le permitan incursionar en nuevos mercados externos.

EU perdería más si deja TLC: Coparmex

El presidente de la Coparmex Coahuila, Luis Arizpe Jiménez, manifestó que de abandonar el Tratado de Libre Comercio (TLC), Estados Unidos tendría más pérdidas que ganancias, por lo que manifestó que será necesario que exista más prudencia a la hora de tomar decisiones.

"No está fácil, de entrada se encarecerían muchos productos de insumos para los americanos y México tiene otras opciones, pues cuenta con muchos tratados y sólo sería necesario de sustituir algunas exportaciones", dijo.

Manifestó que el tratado está integrado por Canadá, Estados Unidos y México, sin embargo, de dejarlo, puede continuar con dos países.

"Con el tratado que se tiene ahorita Estados Unidos no puede cobrar aranceles de más del 3 por ciento, pero si quiere cobrarlo hasta en un 20, no sólo se tendría que salir del TLC, sino de la Organización Mundial de Comercio, lo que generaría un caos", dijo.

Añadió que ante ello es necesario tener la inteligencia, la prudencia y buenos negociadores de México.

Indicó que la parte migratoria es lo más preocupante, pues en las denominadas Ciudades Santuario en Estados Unidos hay alrededor de 2 millones de mexicanos indocumentados.