Rafael Márquez, capitán de la Selección Mexicana, es una de las 22 personas sancionadas por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos por supuestos vínculos con un narcotraficante, anunciaron ayer las autoridades.
El Tesoro indicó que congeló los bienes en Estados Unidos de Márquez, al que señaló como uno de los presuntos testaferros del narcotraficante Rafael Flores Hernández.
"Niego categóricamente cualquier tipo de relación con dicha organización y con los hechos referidos en diversos medios de comunicación, comprendo la situación jurídica en la que me encuentro y de inmediato me enfocaré al esclarecimiento de los hechos con el apoyo de mi equipo de abogados", dijo Márquez en una rueda de prensa en la que leyó un comunicado.
"Aclaro que no, y nunca he participado en ninguna de estas organizaciones que se han ventilado en medios de comunicación", agregó Márquez. "Quiero ser puntual y reiterar mi compromiso de apoyar a los gobiernos correspondientes en la medida que sea posible y mantener informados a los medios de comunicación".
El departamento del Tesoro dijo en un comunicado que entre las otras personas sancionadas está el cantante de banda Julio César Álvarez Montelongo, conocido como Julión.
"Ambos hombres tienen largas relaciones con Flores Hernández, y han servido como testaferros para él y su organización dedicada al narcotráfico y han tenido activos a su nombre", señaló el Tesoro.
Agregó que las sanciones surgen después de una pesquisa que duró varios años sobre la organización supuestamente encabezada por Flores Hernández.
Además de los individuos, fueron sancionados 43 negocios con vínculos con Flores Hernández, entre ellos el club de futbol Morumbi, con sede en Guadalajara, y un casino de esa misma ciudad del occidente mexicano.
Se trata de la mayor designación de su tipo a una organización del narcotráfico por parte de la Oficina de Control de Bienes Extranjeros, según el comunicado.
"Quiero pedir respeto a mi familia, respeto a mi situación que no es normal, es difícil y les pido el mayor respeto posible", agregó Márquez. "Sé que mucha gente está conmigo y no los voy a defraudar. Así como he encarado mi carrera como profesional, hoy en día es mi partido más difícil e intentaré esclarecer esto en cuanto se pueda para ser el 'Rafa' Márquez que ustedes conocen".
Flores Hernández supuestamente operaba independientemente desde Guadalajara, aunque tenía alianzas con los carteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación, según el Tesoro. De acuerdo con documentos de una corte federal, Flores Hernández fue arrestado el 20 de julio y está pendiente su extradición.
La fiscalía mexicana también confiscó bienes relacionados con sus negocios, entre ellos el Grand Casino cerca de Guadalajara.
La fiscalía mexicana dijo que trabaja estrechamente con las autoridades estadounidenses en la investigación y añadió que Márquez se presentó voluntariamente a la Procuraduría General de la República para declarar.
Mike Vigil, ex jefe de operaciones internacionales de la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA por sus iniciales en inglés) y autor del libro "Deal" dijo que Flores Hernández, de 64 años de edad, ha estado involucrado en el narcotráfico desde la década de 1980.
"Es extremadamente astuto en la manera de planear y en la manera de moverse entre carteles", dijo Vigil.
Vigil dijo que Flores Hernández tiene un verdadero talento para lavar sus ganancias del narcotraficante y fundar empresas fantasma. Indicó que sería difícil imaginar que Márquez no supiera que lidiaba con Flores Hernández, quien ha estado durante mucho tiempo en el mundo del narcotráfico.
En declaraciones a la prensa, un alto funcionario del Departamento del Tesoro dijo que la relación entre Márquez y Flores Hernández se remonta a por lo menos 20 años y que el jugador fungió como "un importante testaferro en el lavado de dinero. Bajo los términos del informe, el funcionario solicitó el anonimato. Entre las propiedades de Márquez que el Tesoro vinculó con el caso, están una academia de futbol y clínicas de rehabilitación deportiva.
El Departamento del Tesoro no dijo que Márquez o Álvarez enfrenten cargos en Estados Unidos.
Las sanciones congelan todos los activos en Estados Unidos de las personas y negocios mencionados, además de prohibir que ciudadanos estadounidenses entablen relaciones comerciales con ellos.
En una rueda de prensa donde leyó un comunicado, Rafael Márquez negó las acusaciones que le hizo el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos. (EFE)