Uno de los grandes lanzadores mexicanos que triunfó en Ligas Mayores y radica desde hace 45 años en La Laguna es Enrique "El Huevo'' Romo, pitcher abridor de los Piratas de Pitsburgh cuando fueron campeones en la temporada 1979. En la serie final iban abajo los Piratas por tres a cero y lograron la hazaña de remontar y ganar el título en siete juegos por cuatro a tres.
Cuatro años menor que su hermano Vicente Romo, otro gran pitcher mexicano, Enrique inició su carrera profesional a iniciativa de éste, quien lo envió en 1969 a Coatzacoalcos, Veracruz, a jugar con el equipo Millonarios de Puerto México de la Liga del Sureste con el antecedente de que jugaba béisbol en el equipo de la Secretaría de Marina.
Enrique recuerda que fue un viaje de 40 horas desde Guaymas hasta Coatzacoalcos. Se le hizo tan pesado que en Guadalajara preguntó a una señora cuánto faltaba para llegar al destino final y quedó desilusionado cuando le dijeron que faltaba un día de camino. Tenía en ese entonces 22 años de edad y muchas ilusiones de triunfar en la "pelota de paga''.
Ese mismo año de 1969 iniciaban su carrera los lanzadores Antonio Pollorena y Maximino León con el equipo de Orizaba, Veracruz, filial de los Charros de Jalisco. Con el equipo de la Secretaría de Marina, en donde Enrique era Cabo y cocinero, jugaba de jardinero izquierdo y lo ponían a lanzar de vez en cuando. Gracias a los consejos y enseñanzas de Francisco Maytorena se animó a ser pitcher e inició su brillante carrera con los Millonarios de Puerto México.
En su debut no le hicieron carrera en cinco entradas y esto le dio ánimo, en su primera temporada ganó 11 juegos y perdió tres. Esta marca le valió que los buscadores de Charros de Jalisco enviados por el mánager Guillermo Garibay Fernández se fijaran en él para la temporada 1970 de Liga Mexicana de Béisbol. Con los Charros fue campeón en la campaña 1971, cuando lograron la hazaña de remontar la serie ante Saraperos de Saltillo cuando habían perdido tres juegos en forma consecutiva, Enrique contribuyó ganando el cuarto y el séptimo, el del campeonato. Sus compañeros Maximino León y Antonio Pollorena ganaron el quinto y el sexto, respectivamente.
Recuerda con satisfacción que esta hazaña la volvió a repetir con los Piratas de Pitsburgh en 1979 cuando iban abajo en la serie final por tres a cero. En esa ocasión también lanzó dos juegos, en ninguno de los dos tuvo decisión, en el primero de ellos lanzó una entrada y un tercio, en el segundo dos entradas, pero no le anotaran carrera.
Enrique "El Huevo'' Romo fue el segundo pelotero mexicano en ser campeón del mundo en Ligas Mayores, después del lagunero Horacio "El Ejote'' Piña con los Atléticos de Oakland. Después de jugar dos campañas con los Charros de Jalisco (70 y 71), llegó en 1972 al Unión Laguna que jugaba en el Estadio Rosa de Gómez Palacio, en el que permaneció tan sólo tres meses y desde entonces radica en la Comarca.
De 1973 a 1976 militó con los Diablos Rojos de México, con los que ganó cien juegos en cuatro temporadas, en las cuales ponchó a mil cien bateadores. En 1976, después de ser observado por varios buscadores fue contratado por los Marineros de Seattle, equipo de expansión en la Liga Americana, con los que ganó 11 juegos y perdió dos en dos temporadas (77-78). Además, participó en 22 partidos en calidad de pitcher cerrador.
Confiesa que al llegar a Estados Unidos estuvo a punto de regresarse a México, pero el jugador cubano Diego Segui y el puertorriqueño Julio Cruz lo ayudaron mucho con consejos para que se quedara y triunfara en las Ligas Mayores. "Ellos dos me ayudaron mucho a superar el racismo y como no sabía inglés me apoyaban en la traducción al español. Me quería regresar a Torreón, pero Diego y Julio me alentaron para que triunfara en Estados Unidos y no me diera por vencido ante la adversidad'', recordó con gratitud Enrique "El Huevo'' Romo.
Los buenos resultados obtenidos con los Marineros de Seattle le valieron para que fuera transferido a los Piratas de Pitsburgh, con los que ganó 24 juegos, perdió cuatro y ponchó a 249 bateadores. En Piratas jugó al lado de Willie Stargell, Omar Moreno y Dave Parker. Enrique "El Huevo'' Romo era un pitcher abridor con Piratas para que subieran al montículo Kent Tekulve y Grant Jackson, lanzadores estelares.
Con los Piratas de Pitsburgh jugó de 1979 a 1982, regresando a México en 1983 para jugar en la ANABE (Asociación Nacional de Beisbolistas) y retirarse finalmente con los Indios de Juárez en 1984 en la Liga Mexicana de Béisbol. En la Liga del Pacífico jugó con Ostioneros de Guaymas, Yaquis de Obregón y Venados de Mazatlán, habiendo conquistado cuatro campeonatos de pitcheo.
El primero de ellos fue con Ostioneros de Guaymas con marca de 15-3, el segundo con Venados de Mazatlán con 7-2, el tercero y cuarto con Yaquis de Obregón con 11 ganados y dos perdidos en cada temporada, respectivamente.
Hoy en día se dedica a entrenar jóvenes de 13, 14 y 15 años en el equipo Algodoneros de San Pedro junto con el Profr. Roberto Ornelas. Además, es coach del Deportivo Víctor Orozco de la Liga de Empleados y Profesionistas. Enrique "El Huevo'' Romo seguirá siempre ligado al béisbol, ya que le dio grandes satisfacciones con su trabajo realizado, como ser campeón en Liga Mexicana con Charros de Jalisco y campeón del mundo con Piratas de Pitsburgh, logrando la hazaña de ganar el título cuando perdían la serie tres a cero y la ganaron finalmente cuatro a tres.
¡Hasta el próximo miércoles!
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