Domingo de Ramos. Miles de católicos acuden a la Catedral de Guadalupe a conmemorar el inicio de la Semana Santa. (CLAUDIA LANDEROS)
El día de ayer se congregaron fieles católicos en la parroquia de la virgen de San Juan de los Lagos de Gómez Palacio, para celebrar el Domingo de Ramos, iniciando con la procesión en la que se representa la llegada de Jesús a Jerusalén.
Con cantos litúrgicos, los ramos en alto y la fe por delante, caminaron los feligreses acompañados por el segundo obispo de la Diócesis de Gómez Palacio, José Fortunato Álvarez Valdés y el vicario general, Julio Carrillo Gaucín.
Los esperaban alrededor de dos mil personas en la Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe, para recibirlos entre ramos, al igual que Jesús recibió alabanzas con hojas de palma en su recibimiento.
Ante una Catedral abarrotada, se celebró la Eucaristía con la cual da inicio el misterio Pascual, en preparación para recordar y vivir la Pasión de Cristo durante los días santos.
La ceremonia eucarística fue oficiada por el mismo obispo, Fortunato Álvarez. "Es el Domingo de Ramos, también conocido como el domingo de la Pasión, es el único domingo de todo el año en que se lee la Pasión completa de acuerdo a la versión de los evangelios hoy tocó la de Mateo y es impactante escuchar la narración de la pasión y muerte de Jesús, es un domingo especial", comentó en su mensaje.
Explicó que este día tiene como características la conmemoración de la entrada de Jesús a Jerusalén, aparentemente era el triunfo, la conquista de Jerusalén, sin embargo, la gente lo recibe muy bien, pero después lo deja abandonado.
"También estamos conmemorando ese inicio de la Semana Santa, esos misterios en que la gente está arraigada, su fe en Jesús a quien nosotros seguimos", agregó el obispo.
Para la Iglesia en estos días es importante invitar a la gente a que contemple a Jesús como víctima, ya que actualmente se vive en un mundo con mucho dolor, violencia, enfermedades y una situación económicamente opresora.
