APROVECHE LOS RESTOS DE JABÓN
Guarde todos esos trozos de jabón que ya no se pueden usar. No los desperdicie, todavía les podrá sacar partido. No importa que sean de diversos tipos, aromas y colores. Cuando ya tenga una cantidad regular de ellos, póngalos en una charola de horno, vacíe un poco de agua y usando una flama suave, deje que se funda lentamente el jabón, agitando de vez en cuando. Una vez derretido y bien mezclado, déjelo endurecer y finalmente corte con un cuchillo filoso pastillas del tamaño que le convenga. Nuevamente, tendrá buenos jabones.
¿DE VIAJE?
Al acomodar sus maletas para un viaje, en vez de doblar su ropa, enróllela cuidadosamente. Comience por la parte superior de la prenda y alísela hacia los lados a medida que la va enrollando. Hágalo con toda clase de ropa. Verá que en sus velices puede acomodar más. Si su esposo comparte la maleta con usted, ponga en un lado la ropa de él y del otro la suya. Así les será más fácil encontrar lo que quieren y además verán que no hay arrugas marcadas.
MARQUE LOS CALCETINES
Es difícil diferenciar los tonos de azul marino, café, gris y aún negro en los calcetines de hombres y niños. Siempre hay que acercarse a la ventana para no cometer errores y hay ocasiones en que a pesar de este cuidado, mezclamos un tono con otro. Evite esto comprando un frasco de tinta indeleble de color fuerte y póngales el mismo número a cada par en la planta: 1, 2, 3, etc. Es mucho más fácil y rápido que marcarlos con hilos de distinto color. Las marcas con esa clase de tinta duran mucho tiempo, pero cuando ya no se note bien, repáselas.
SIN QUEMARSE LOS DEDOS
Cuando quiera encender una flama sin acercar demasiado los dedos, si carece de un cerillo lo bastante largo para hacerlo, tome un espagueti y úselo para el objeto, por supuesto, deberá estar crudo y aunque tal vez lo dude usted, sí se prende.
UN TREN PARA LOS NIÑOS
No tire los envases de cartón en que viene la leche. Con ellos, haga un tren para que jueguen sus niños o para cuando lleguen a visitarlos sus nietos. Enjuáguelos perfectamente y guárdelos en donde no le estorben. No necesitará muchos, bastará con 4 ó 5 para un largo tren. Llegado el momento en que deba ponerlos en las manos de los niños, con el picahielo hágales agujeros en la parte superior e inferior para que pase por ellos un cordón largo a fin de unirlos. Para que no se junten ni se encimen, puede usar carretes vacíos de hilo para dividir a los "vagones". Para la máquina, procure usar un cartón de 2 litros y a dos o tres quíteles el lado de arriba para convertirlos en furgones de transporte, que servirán para arrastrar muñecas de papel, canicas, botones y muchas de las chacharitas pequeñas con que juegan los niños.
FUNDAS PARA COJINES
Los cierres de las fundas de los cojines de los muebles que son de quitar y poner, deben colocarse en uno de los lados y no en la parte de atrás como regularmente se hace. En esta forma, como la parte delantera se ensucia siempre con el uso normal, tanto como lo de arriba del cojín, se podrá voltear éste de manera que el lado de atrás quede adelante y lo de arriba abajo, mientras llega el día en que se tienen que lavar.
