El pasado 22 de enero en San Bernardo, Argentina, un delfín bebé fue arrastrado hasta la costa y se quedó varado en la playa. Los turistas que estaban ahí, en lugar de ayudar al animal a regresar al mar, decidieron tomarse fotografías con él.
De acuerdo con el periódico 'La Capital' y evidenciado a través de un video subido a la red, las personas decidieron sacar al delfín del agua para tomarse ‘selfies’ y tocarlo. Estando en la playa, eventualmente el animal murió.
Así lo cuenta también una testigo en el canal de televisión ‘C5N’, quien comenta: “Lo podían devolver al mar, porque de hecho respiraba, pero se pusieron a sacarle fotos y tocarlo. Lo dejaron morir".
La historia ha causando indignación. (INTERNET)