Salió bueno para la 'cantada'
-Oye y en Lerdo, ¿adivina a quién me encontré en un conocido restaurante de mariscos que me recuerdan a Mazatlán?
-Ah sí, ¿el que está allá por el periférico Gómez-Lerdo?
-Sí, sí, donde hay hasta variedad.
-A menos que sea un exfuncionario que no canta mal las rancheras, no sé a quién más te refieras.
-Pues sí, resulta que el exdirector de Obras Públicas y Desarrollo Urbano, Arturo Rodríguez de León, famoso por tener una voz privilegiada para las pachangas, serenatas, bodas, quinceaños y demás, le hace a la artisteada en este famoso lugar.
-Oye, entonces ha de andar por la calle de la amargura con eso de que no le tocó ningún "hueso" al también exsecretario regional de la Secope con la desastroza derrota del PRI en el estado en la pasada contienda, y la llegada de un nuevo grupo político a la silla presidencial de Lerdo.
-Pues ni tanto, mira que ahí como lo ves, don Arturo era nada menos que el director municipal mejor pagado en la pasada administración municipal, además de que Dicen que sus amigos contratistas le tenían tanto, pero tanto aprecio que le regalaban una parte del porcentaje de algunas obras, incluso, dicen, tuvo la oportunidad de hacer uno que otro "trabajillo" con una empresa que fundó con otro exfuncionario municipal.
-Oye, ¿y crees que cante como debe si lo manda llamar la Entidad de Auditoría Superior del Estado por alguna que otra observación realizada en obras correspondientes al 2016?, ¿dime que tal fue su desempeño en la función pública?
-Amigo moyote, yo creo que como director de Obras Públicas, el buen Arturo Rodríguez fue un excelente.... cantante.
-Dicen las malas lenguas que por ahí en el Estado, el Instituto de Cultura del Estado de Durango (ICED) continúa en el poder de las mafias que se formaron durante los dos sexenios anteriores.
-Y el nuevo jefazo estatal, José Rosas Aispuro Torres, ¿no está ahí para hacer valer su poderío como gobernador y realizar algunos cambios o ajustes?
-Pues yo creo que la está pensado o ya no le importa mucho, porque hasta la fecha no se le ve decidido a sacar lo que ya no sirve de ahí, por ejemplo, algunos servidores públicos.
-Espero no se tarde, porque en lo que lo piensa, estos "mafiosos" traerán a la pobre dependencia de cultura como les venga en gana.
-Sí, y, ¡vaya que necesita de forma urgente un renovación!, incluyendo a personas que sí tengan vocación de servicio y de generar un cambio verdadero.
-Oye, ¿y crees que este "pequeño" problemilla afecte a mi "Ernestina Gamboa"?
-¿A quién?
-Me refiero a la Casa de la Cultura de Gómez Palacio, así se llama.
-¡Ah!… Sí fíjate, porque las "mafias" no perdonan. Figúrate que según los moyotes de Gómez Palacio, en tu "Ernestina" han reproducido el patrón y hay personas enquistadas en puestos públicos de los que únicamente se han servido para sus intereses y que han obstaculizado el desempeño de la institución.
-¡Qué triste!
-Y eso no acaba ahí. Han llegado zumbidos de que al administrador de la Casa de la Cultura, Juan Méndez, se le ubica como allegado del director de Recursos Humanos del ICED, Luis Valderrama Cháirez.
-¿Valderrama Cháirez?, ¿el que es señalado por el tráfico de plazas, interinatos y por incluir en la nómina a sus compadres e integrantes de su familia?
-Sí, y te faltó mencionar que también es señalado por asignarles sueldazos superiores a los 30 mil pesos mensuales.
-Entonces conviene ser "amigazo", primo, hermano, cuñado o hasta mamá de Valderrama. ¿Crees que me adopte como sobrino?
-No seas arpía como éstos que nomás no se van de sus puestos.
-¿En serio?, pues ¿cuántos años tiene Valderrama y Juan Méndez en sus cargos?
-¡Uh, ya más de una década!
-O sea que desde que Ismael Hernández era gober.
-Sí. Imagínate, con estos dos como aliados, la Casa de Cultura no tiene esperanzas. Es por eso que me preocupa el actual director, Ramón González.
-¿Por qué?
-Porque no le bastarán las buenas intenciones, sino que deberá hacerse de mejores perfiles si realmente quiere cumplir su propósito de "levantar" la muy deteriorada Casa.
-Mas le vale echarle todos los kilos porque a mi amada "Ernestina", me la arreglan porque me la arreglan.
