VOZ DEL DIHABLO

Este año se cumple el 30 aniversario de muchas grandes obras en el rock y el metal. Y sí, cada año se puede decir lo mismo a partir de 1980 (por lo menos), pero me queda claro que hay años más prolíficos en cualquier materia que otros. Igual pudo ser 1984, 1986, 1991, 1994 o así...

En este caso, vayamos a 1987, por la cuestión romántica de las tres décadas.

Keeper of the Seven Keys, Part I - Helloween. Abre una breve pero maravillosa etapa de una de las bandas más importantes del heavy metal. La voz de Kiske, casi insuperable, única. Los riffs, las melodías...

Abigail - King Diamond. ¿Qué se puede decir de su Majestad que no se haya vivido ya en su gira por México este año? Digo, no fui, pero no he escuchado un solo comentario negativo del concierto; por el contrario, todas las voces coinciden en que ha sido "de lo mejor que han visto en sus vidas". Una obra maestra, por algo se tocó completa en una visita tan especial.

Scream Bloody Gore - Death. Todo lo que hizo el señor Chuck Schuldiner está avalado por la Asociación Internacional de Trves y Possers del Metal, por lo que no hay mayor discusión. Metal extremo con su ligero toque de melodía.

Under the Sign of the Black Mark - Bathory. Perteneciente a la primera camada de bandas de black metal, clásicas y obligatorias. Quorthon llevó la parte vikinga de los escandinavos a una nueva latitud.

Among the Living - Anthrax. Su mejor disco por mucho, el más clásico. Una banda de sabroso 'thrash', divertidos sobre el escenario. Anthrax no es para todos, pero los que somos nunca hemos dejado de disfrutar sus buenos discos.

The Legacy - Testament. Más 'thrash' norteamericano en sus mejores manifestaciones que compite con el Master of Puppets de Metallica, también de la época.

Dream Evil - Dio. El "Jefe", la voz que abrió paso al 'heavy', deja en esta entrega grandes temas como All the Fools Sailed Away o el que le da título al álbum.

The Ultra-Violence - Death Angel. El nombre lo dice todo.

Terrible Certainty - Kreator. ¡Pf! Poder y destrucción al alcance de cualquier oído.

Más títulos de 1987: Nightfall - Candlemas; Taking Over - Overkill; Scum - Napalm Death; Hall of the Mountain King - Savatage; Pleasures Of The Flesh - Exodus; The Eternal Idol - Black Sabbath...

Y en otros parámetros, no menos disfrutables, repasemos cuatro geniales álbumes que marcaron época.

Girls, girls, girls - Motley Crue. Parece el que la parte punk de la banda se desvanece pero no dejan su polémica imagen y un álbum con temas memorables.

Whitesnake - Whitesnake. De lo mejor del hard rock con el genio David Coverdale. En los teclados aparece Don Airey como invitado y temas inolvidables: Crying in the Rain, Still of the Night, Here I Go Again, Give Me All Your Love, Is This Love.

Hysteria - Def Leppard. Quizá el último disco clásico de estos ingleses, pioneros del New Wave of British Heavy Metal.

Y por último, Appetite for Destruction - Guns N' Roses. Los polémicos angelinos habrán hecho de todo, y si algo bueno hicieron fue este disco, que en muchas listas de popularidad se ostenta como lo mejor en su especie.

Todo eso pasó en un año, más lo que se me escape a la memoria.

Y en la gustada sección de saludos, dejo los respectivos al Pata (que me abrió los ojos al pasado), al Irving (que no me quiere llevar al Mother of All) y a los compas del Templo del Metal (transmisiones los domingos), encabezados por Aurelio Alvarado. See you!

La Música del Dihablo [Facebook] y @Foko_54.