En ninguna parte del estado se ha denunciado rapto de niños, y las autoridades no han encontrado indicios de la existencia de dicho delito; sin embargo, este fin de semana en la capital, un hombre fue acusado falsamente de "robachicos", según las investigaciones.
Ruth Medina Alemán, fiscal general del Estado, afirmó que el domingo recibieron este reporte.
Fueron dos llamadas desde diferentes números en las cuales se aseguraba una conducta criminal en un transportista, se señaló que quería robar algún niño. Esto quedó descartado como todos los comentarios sobre presuntos intentos de rapto.
Sin embargo, en este caso, el taxista estuvo a punto de ser agredido.
"Estaban alertando y generando violencia al grado de que estuvo a punto de ser agredido un taxista acusado", manifestó la fiscal.
ACCIONES EN CONTRA
Debido a que con las llamadas falsas casi provocaron un ataque contra el transportista, la fiscalía estatal actuará contra los responsables. "Hoy vamos a actuar, tenemos ya ubicados a quién hizo dos llamadas y vamos a dar con ellos", dijo.
Medina Alemán aseguró que están cerca de los bromistas que pusieron en riesgo la estabilidad del taxista.
Los responsables habrían hecho las llamadas desde un teléfono público y un celular.
DE LAS SANCIONES
El delito del uso indebido de llamadas telefónicas se establece en el artículo 406 del Código Penal del Estado, mismo en el que se precisa que quien incurra en él, podría ir de tres a seis meses a prisión y hacerse acreedor a una multa de 18 a 36 veces la Unidad de Medida y Actualización (UMA).
Pero, si estas llamadas provocaron un daño entonces el castigo aumenta a uno o cuatro años de cárcel, así como una sanción pecuniaria de 62 a 288 veces la UMA, lo que equivale a una infracción económica de entre 4, 997.2 pesos y 23, 212.8 pesos.