Buenos momentos.
Diversión en la cocina
Agencias
Se aproxima el Día del Niño, y una excelente manera de festejar a los más pequeños de la casa y disfrutar tiempo de calidad a su lado es, definitivamente, en la cocina. No sólo representa una oportunidad de aprendizaje práctico (ahem, porciones=matemáticas), sino también de inculcarles valores, responsabilidad y, ¿por qué no?, una buena dosis de diversión.
Comienza por los básicos: sí, todo mundo sabe que, antes de comenzar a comer o cocinar, es importante lavarse las manos, pero nunca está de más recordarles. También háblales sobre la importancia de recogerse el cabello, el usar ropa adecuada, así como portar un delantal.
Es importante no desesperarse: puede que tú, como adulto comprendas instrucciones y realices mejor ciertas tareas, pero recuerda que para tu pequeño se trata de una nueva experiencia y puede que le lleve más tiempo. Por último, te recomendamos desde un principio que no esperes pulcritud; a menos que seas un chef de hierro y tengas todo bajo control, cocinar puede resultar ser una tarea algo sucia.
Con estas "advertencias" bien definidas, ahora sí: a poner las manos en la masa.
Cupcakes o algo más
¿Qué hornear? Puede que no sea una pregunta sencilla. Después de todo, existe una enorme variedad de preparaciones. Tan solo toma en cuenta la edad de tu hijo y, por lo tanto, el nivel de dificultad de las recetas.
Entre todas las opciones de repostería disponibles, los bien amados cupcakes se destacan por su sencillez y variedad. No solo los puedes disfrutar individualmente, sino armar "pasteles" con ellos. El toque de color, por ejemplo, se lo puedes proporcionar a través del betún y la decoración que escojan. En Youtube puedes encontrar cientos de videos DIY o "hágalo usted mismo" que te explicarán paso a paso, cómo decorarlos, no solo con el betún o frosting, sino haciendo uso de perlas, chochitos o cristales de azúcar, figuras de fondant o la forma de algún personaje infantil.
A continuación te presentamos dos recetas básicas de cupcakes, pensadas para los pequeños: vainilla y chocolate. En cuanto a la decoración, un betún clásico siempre es muy buena opción, aunque recuerda que tú mismo puedes cambiar el sabor y color a tu antojo con la ayuda de colorantes vegetales y esencias naturales. Puede que cocinar no sea sencillo pero sí que es divertido, y te aseguramos que, al lado de tus hijos, lo será aún más.
Damián y Jorge.
Agencias